Vivir ligando que llegue el agua

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Foto: Archivo.

Nathaly Tovar debe llegar todos los días de su trabajo a ver si la pega y logra agarrar, aunque sea, un chorrito de agua para llenar un tobo que tiene en su casa.

Ella tiene dos hijos, uno de 6 y el otro de 7 años. Es madre soltera y vive en el barrio Caujarito de la capital de Apure.

Así como ella, miles de familias de otras 49 comunidades de San Fernando llevan una semana sin el servicio de agua potable.

La joven mamá debe ligar entre las 7:00 y las 9:00 de la noche de todos los días que llegue algo de agua. Si eso no ocurre, debe salir a la toma de la calle a “chupar” la boca de la tubería.

Tovar relató a Radio Fe y Alegría Noticias que cuando esto ocurre, el líquido sale con mal olor: “a cloaca y viene como si trajera barro”.

Silencio oficial

Desde Hidrollanos, la hidrológica de Apure, no hay información oficial. Un alto gerente de la empresa estatal reveló que tienen prohibido, por parte de la Ministra de Aguas, dar declaraciones a los medios para explicar los problemas que confrontan para garantizar el servicio.

Fuentes extraoficiales señalan que se dañó un equipo de 50 HP de la principal toma de agua en el río Apure. Éste sería el tercer equipo de bombeo que se avería en menos de 5 meses. Los otros dos salieron afectados tras los apagones eléctricos del mes de marzo.

Para rematar, solo existen 3 camiones cisternas que no logran darse abasto para atender a más de 90 barriadas solo del municipio San Fernando.

En lo que va de 2019, la capital de Apure ha estado prácticamente a secas por las fallas continuas en el suministro de agua potable.

En los otros 6 municipios de la entidad la situación es similar. Y no se avizora una solución en el corto plazo.