La Oficina de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos reportó que en Colombia se registraron 36 masacres a lo largo del año 2019.
El organismo indicó que en esos hechos perdieron la vida 133 personas, la cifra más alta en la historia de ese país desde el año 2014.
Según cifras de la Policía Nacional, la tasa nacional de homicidios en el 2019 fue de 25 por cada 100 mil habitantes, lo que para el representante de la Oficina del Alto Comisionado en el país, Alberto Brunori, es un «nivel de violencia endémico».
Brunori presentó un informe en el que constata que las regiones más afectadas por la violencia endémica son los departamentos de Antioquia, Cauca y Norte de Santander. En el documento destacan las disputas por el control de las «economías ilícitas» como principales causas de la violencia.
En dichos enfrentamientos estarían involucrados grupos de crimen organizado, paramilitares y otras mafias organizadas nacionales e internacionales que usaron la extrema violencia para garantizar el control territorial.
La oficina, liderada a nivel mundial por Michelle Bachelet, dijo que considera de particular preocupación las agresiones a defensores de derechos humanos, a los pueblos indígenas y el incremento en los casos de privaciones arbitrarias de la vida, así como violaciones cometidas contra niños en el contexto de la violencia y el conflicto armado.
La oficina de la Alta Comisionada reiteró la necesidad de atender las causas estructurales que generan violencia, especialmente en zonas rurales, y que están relacionadas con la falta de acceso a los derechos humanos”, dice el informe.
Igualmente, el texto denunció que los esfuerzos del Estado para establecer una presencia integral de autoridades militares y civiles como la Fiscalía General y la policía, fueron insuficientes, en particular, en las zonas rurales.
