Tips para discernir la realidad. Miércoles 20 de enero de 2021.
Por Antonio Pérez Esclarín.
Reconciliación nacional
Llevamos ya demasiados años de enfrentamientos, odios, violencia, que solo han traído sufrimiento y destrucción. Si amamos a Venezuela y queremos acabar con tanto dolor y emprender el camino de la prosperidad y la paz, debemos empezar a trabajar por una verdadera reconciliación.
Reconciliar no es homogeneizar, ni ocultar los puntos de enfrentamiento, ni las diferencias, sino ayudar a que las diferencias se conviertan en valor y no en abismo; o ayudar a que cuando se hayan generado abismos, como es en nuestro caso, encontremos el camino para restablecer los puentes. En la cultura que vivimos de profundo relativismo moral, y en que la política se ha divorciado por completo de la ética, no va a ser fácil la reconciliación, sin embargo, si no queremos renunciar a nuestra condición humana y nos negamos a aceptar como destino la barbarie, no podemos renunciar a reconciliarnos.
La reconciliación parte del reconocimiento de la común condición humana, que toma en serio la dignidad de cada persona y busca el bienestar de todos.
Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.