José Manuel Bolívar, vocero de la Asociación Nacional de Instituciones Educativas Privadas (Andiep), informó que de nueve millones de estudiantes en Venezuela, 1.500.000 no están inscritos en colegios.
En una entrevista concedida al medio de comunicación VPItv el pasado 29 de octubre, Bolívar alertó sobre la deserción estudiantil que se vive en el país, esto luego de que el 25 de octubre se reanudaran las clases presenciales en Venezuela después de 19 meses.
Pero esta situación ya la había advertido Andiep a mediados de octubre. Fausto Romeo, presidente de esa organización ofreció una entrevista al medio de comunicación Unión Radio, donde expresó que el 35% de los estudiantes no estaban inscritos en el sistema educativo de cara al inicio del nuevo año escolar.
Agregó que debido a la disminución de estudiantes en los diferentes planteles educativos, también mermó la cantidad de docentes, personal administrativo y obrero.
«Casi 35% de los estudiantes no están escolarizados para este año. La nómina de los docentes, administrativos y obreros disminuyó porque los estudiantes disminuyeron», aseguró.
En ese sentido, expresó que Andiep para el año 2017-2018 llegó a representar el 30% del sistema educativo de Venezuela y ahora se encuentra en 18%.
¿Por qué no los estarían inscribiendo?
El pasado 26 de octubre en la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) se presentó la Encuesta Nacional sobre Juventud en Venezuela (Enjuve 2021), la cual fue realizada entre febrero y agosto sobre una muestra de entrevistas a 10 mil 765 jóvenes, pertenecientes a los casi 14.000 hogares estudiados como parte de la Encuesta de Condiciones de Vida (Encovi).
Uno de los datos que halló el estudio fue que entre 2013 y 2021 aumentó en el país el fenómeno de la «doble exclusión», al pasar de 23% a 37% el porcentaje de venezolanos entre 15 y 29 años que no están inscritos en algún centro educativo ni están insertos en el mercado laboral.
Radio Fe y Alegría Noticias entrevistó a Francisco Coello, sociólogo y profesor de la UCAB, para analizar estas estadísticas y concluyó que son el resultado de lo que se palpa en la calle: «No hay oportunidades de empleo, estudiar es irrelevante en un contexto como el que está viviendo Venezuela. Estudiar no te garantiza empleo, no te garantiza oportunidades».
Para Coello, la desesperanza aprendida, que cree que se ha promovido desde el Estado, ha tenido su impacto.
«Efectivamente este tipo de resultados es esperable en una sociedad en que tú te paras en la mañana y tienes que, en primer lugar, plantearte cómo puedes sobrevivir ese día y segundo, no hay en el horizonte opciones creíbles para salir de esa situación», acotó.