El médico veterinario Paúl Márquez es presidente de la Federación de Ganaderos de la Cuenca del Lago de Maracaibo, Fegalago, y este martes 29 de septiembre compartió una radiografía de la actual situación de los productores agropecuarios en el país, a través de Radio Fe y Alegría Noticias.
Empieza por explicar que la deficiencia generalizada de los servicios públicos también les afecta directamente en su trabajo diario.
Entre estos problemas los apagones eléctricos, sobre todo en el estado Zulia, perjudican enormemente la producción de leche ya que para poderla enfriar se necesita el funcionamiento los tanques en las fincas.
Márquez describe que «para enfriar leche se necesitan 24 horas de electricidad, tanques de enfriamiento y una mano de obra calificado, la cual se ha ido a Colombia».
Debida a a esta realidad muchos productores agropecuarios han tenido que cambiar de rubros.
Por ejemplo, los ganaderos del Zulia han optado por la elaboración del llamado queso de matera (de forma artesanal) para no perder la leche.
«Este queso tiene la ventaja que dura varios días y uno lo puede llevar a los centros de consumo», precisa el ganadero.
Tal vez una de las desventajas que se origina con esta nueva modalidad es que se produce una sobre oferta de quesos y por ende el producto baja de precio.
Esta situación ha originado que se reduce la disposición de leche fría para llevarla a las plantas procesadoras.
Donde se ha complicado en demasía el escenario para colocar la producción de lácteos sólidos ha sido en los estados llaneros, relata el presidente de Fegalago.
Señala que en entidades como Apure, Guárico y Barinas, catalogadas como las principales zonas productoras de queso a nivel nacional, las dificultades para sacar los productos y llevarlos a ciudades del centro del país «son mayores porque sencillamente no tienen combustible».
En ese sentido, Márquez pronostica que para las próximas semanas se producirá un desabastecimiento «en los principales centros poblados porque no hay combustible para llevar los productos».
Cuando no es el chingo es el sin nariz
En algunas ocasiones, los productores han colocado plantas eléctricas para sortear esos problemas eléctricos «pero esas plantas funcionan con gasoil que ya también ha comenzado a escasear pese a que hasta no hace mucho había suficientes inventarios».
Márquez alerta que al no haber combustible se ha originado una parálisis total de la maquinaria en las fincas.
Destaca que en las últimas semanas el déficit de combustible ha provocado que ni siquiera se pueda atender a los sectores esenciales, incluyendo a los enfermos y mucho menos a los productores de varios rubros alimenticios.
Se lamenta que el tema de los servicios públicos los circunscriba a solo resolver problemas básicos que inciden en la disminución de la producción de leche y carne.
Cuestión que no les permite a los ganaderos dedicarse a otros temas más importantes como el mejoramiento genético, la tecnificación de las fincas y la adecuación de otras líneas de producción.
¿Cómo se han organizado los productores agropecuarios ante esta crisis?
Paúl Márquez resalta que entre ellos se ha activado una amplia solidaridad, ya que se suelen agrupar para llevar los insumos a las fincas y para sacar la producción.
También a través de las asociaciones de ganaderos estimulan la solidaridad para «no detenernos en nuestro trabajo de llevar los alimentos a los hogares venezolanos».
Enfatiza que su responsabilidad va más allá de intereses particulares y políticos. Pese a los ingentes problemas que confrontan han cumplido.
Por lo pronto, se siguen reuniendo con las autoridades nacionales y regionales en la mira puesta a las soluciones para que los productores coloquen en los centros de consumo sus productos.
Márquez termina su diálogo remarcando que «Venezuela tiene la capacidad para tener suficiente cantidad y calidad de alimentos».
