La Corte Suprema de Brasil y el Congreso de Colombia iniciaron un debate centrado en la necesidad de construir mecanismos para regular el uso de las redes sociales.
El proceso de debate lo lidera el juez Luis Roberto Barroso, presidente de la Corte Suprema de Brasil, quien utiliza el asalto al palacio presidencial de Brasil ocurrido en el año 2022 para dar contexto sobre la presunta necesidad de tomar acciones en estas plataformas.
Cabe resaltar que después de los hechos del 2022, activistas de estas acciones fueron juzgados.
En el mencionado año, las redes sociales se convirtieron en canales de transmisión de noticias falsas o desinformación por parte de presuntos factores interesados en causar caos en Brasil.
Según Barroso, muchas de las publicaciones en las redes sociales, después de las elecciones presidenciales del 2022 en Brasil, generaron “odio”.
Uno de los factores claves que a juicio de Barroso fue difundido con alevosía y de manera sistemática, fueron las denominadas teorías conspirativas.
También evidenció que varios actores de la política con objetivos subversivos crean cuentas falsas y difunden mensajes falsos. Denunció que las plataformas no cuentan con una política de verificación de una cuenta real. Tampoco cuenta con una política que garantice la detección y eliminación de cuentas falsas.
Según Barroso, ante hechos de ese tipo el Congreso y la justicia brasileña deben tomar medidas.
Colombia podría restringir el uso de las redes sociales a menores de 14 años
Por su otra parte, también se conoció que el Congreso de Colombia trabaja en la producción de un instrumento que busca restringir el uso de las redes sociales.
En primera instancia, los menores de 14 años de edad serían los objetivos urgentes de las posibles nuevas leyes para “proteger la salud mental y el bienestar de la infancia”.
De acuerdo con declaraciones del ministro de Tecnologías de la Información y la Comunicación (MinTIC), Mauricio Lizcano, “la exposición temprana a redes sociales puede tener consecuencias graves en la salud mental de nuestros niños, niñas y adolescentes”.
Otra de las consecuencias sería el aumento de la ansiedad, depresión y problemas de autoestima.
Bajo esos argumentos, el Gobierno colombiano pretende prohibir a los niños el acceso y la creación de cuentas en las redes sociales.
Con información de AFP.
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