Carlos Trapani, coordinador general de la ONG Centros Comunitarios de Aprendizaje (Cecodap), advirtió que no es recomendable en estos momentos que los adolescentes participen en manifestaciones públicas.
“Eso no significa que claudiquemos en nuestros derechos, principios o posturas (independientemente de cuál sea), pero sí es importante preservar la vida y la seguridad por sobre todas las cosas, valorando la cantidad de detenciones que ha habido en el contexto de manifestaciones”, aclaró Trapani en entrevista con el programa De Primera Mano TV, transmitido por Radio Fe y Alegría Noticias y Canal 11 del estado Zulia.
Según el balance de Foro Penal, desde el 29 de julio hasta hoy se han registrado 1.152 detenciones, de las cuales 101 corresponden a adolescentes.
#7Ag Balance de represión (postelectoral) actualizado a las 8:00am por @ForoPenal.
— Foro Penal (@ForoPenal) August 7, 2024
Detenciones y asesinatos verificados, ocurridos desde el 29/07 hasta el 07/08 8am:
– 1.152 detenciones
(101 adolescentes y 5 indigenas)
Seguimos recibiendo denuncias y actualizando cifras. pic.twitter.com/igvpmfJi72
Patrones preocupantes de detenciones
Cecodap identificó patrones preocupantes en las detenciones de jóvenes. En muchos casos, se observa un uso excesivo de la fuerza y detenciones violentas que no cumplen con criterios de proporcionalidad, necesidad y urgencia.
El abogado Trapani señaló que la Ley de Servicio de Policía establece que se deben extremar las precauciones al tratar con adolescentes, sin embargo, Cecodap evidenció que estos parámetros no se están cumpliendo.
Otra preocupación es el incumplimiento del plazo de 24 horas para presentar a los detenidos ante un juzgado de control, cayendo así en situaciones de detenciones arbitrarias.
Además, se ha reportado que los adolescentes detenidos quedan incomunicados de sus familias y abogados privados o de organizaciones de derechos humanos, violando la ley que ordena la comunicación inmediata con los padres.
“Hemos visto en redes sociales y medios de comunicación, como denuncia recurrente de la familia, que no saben a ciencia cierta qué pasó con su hijo ni por qué causas lo están imputando”, declaró Trapani.
Agregó que se ha visto un uso inadecuado de la imagen de los adolescentes en redes sociales, donde son expuestos públicamente y catalogados como terroristas sin haber culminado el proceso de investigación.
“Si en el contexto de una manifestación hay hechos que representan delito, hay una responsabilidad, pero eso no significa la criminalización de este derecho”, razonó.
Los niños y adolescentes también son ciudadanos activos
El coordinador general de Cecodap pidió reconocer a niños, niñas y adolescentes como ciudadanos activos que forman parte de la dinámica comunitaria, nacional, familiar y escolar. “Ellos tienen mucho que decir con respecto a lo que estamos viviendo como país”, señaló.
Destacó que el contexto actual ofrece una oportunidad valiosa para desde la familia abrir espacios de diálogo y enseñar a los jóvenes sobre la democracia, la vida en ciudadanía y el ejercicio de sus derechos, así como la protección frente a los riesgos.
Recordó que, al ser ciudadanos, los niños tienen el derecho de participar, expresar sus opiniones, reunirse, asociarse y manifestarse pacíficamente, tal como lo reconoce la ley.
No obstante, insistió en que corresponde a los padres custodiar y proteger a sus hijos, adoptando medidas para evitar que sean detenidos.
“Tenemos que buscar fórmulas alternativas y seguras para poder ejercer este derecho”, sugirió Trapani, mencionando actividades como cineforos, artes y sociodramas.
Afectación a la salud mental en adolescentes y adultos
Sobre el impacto del contexto actual en la salud mental de adultos y niños, apuntó que los estados de ansiedad, tristeza, frustración y angustia están afectando la dinámica familiar, las estrategias de crianza y la comunicación con los niños.
“Tenemos que desintoxicarnos de información y del contexto en algún momento del día”, aconsejó Trapani.
Recalcó que esto no implica ser indiferente a lo que ocurre en el país, sino buscar espacios de autocuidado como caminar, meditar, bailar, leer y escuchar música.
“Si yo estoy alterado, triste, preocupado o con rabia, voy a trasladar esas emociones a los niños”, aseveró, añadiendo que es crucial estar atentos a cómo los niños manejan sus emociones.
Exhortó a observar cómo los niños perciben y responden a su entorno, ya que reciben información por distintos medios y escuchan las conversaciones de sus padres, vecinos y otros familiares.
Pedir ayuda es válido
Frente a eso, pidió estar atentos y acompañar a los niños en sus emociones. “Si los padres sienten que la situación los desborda, pedir ayuda es válido”, manifestó, sumando que las redes de apoyo familiar y las organizaciones de la sociedad civil ofrecen servicios de salud psicológica gratuitos y a distancia.
Entre las herramientas para aliviar tensiones y estados emocionales negativos, nombró incorporar el juego en la dinámica familiar. “Para poder jugar, se requieren tres elementos: tiempo, espacio y un compañero de juego. Incluso con adolescentes, el juego puede ser un catalizador de tensiones”, explicó.
Finalmente, Trapani subrayó que en los asuntos vinculados a los niños son indispensables tres actores: el Estado, las familias y la sociedad. El Estado tiene la obligación primaria de garantizar los derechos y asegurar que el ejercicio del derecho a la manifestación sea seguro.
Cecodap ofrece servicios de alcance nacional, incluyendo atención psicológica y jurídica remota a través de mensajes de texto, llamadas telefónicas y videollamadas. Para más información, se puede visitar www.cecodap.org.ve o seguir a Cecodap en X (antes Twitter) e Instagram @Cecodap, o llamar al 0212 952-7279.
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