Autoridades del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) anunciaron este martes que tendrán que despedir a 1.500 empleados en el mundo, lo que les permitirá ahorrar 431 millones de euros.
La organización, con más de 20 mil personas en un centenar de países, tomó la decisión en medio de un plan para ahorro, según reseña la agencia EFE.
El ente internacional señaló que en al menos veinte de los 350 lugares desde los que operan tendrán que cerrar.
Otra oficina u otras entidades humanitarias o especializadas en tareas de desarrollo tomarán el trabajo que dejen, indicó el Comité según la agencia de noticias.
Para poder funcionar durante este 2023, la Cruz Roja presupuestó 2 mil 800 millones de euros en contribuciones para mantener las labores, explicaron al realizar el anuncio.
En el plan de reestructuración, la organización aseguró que intentará minimizar la reducción de puestos de trabajo. Esto se hará congelando nuevas contrataciones y a través de las partidas naturales de empleados.
La Cruz Roja cerrará algunos programas
El Comité anunció que también reducirán el tamaño de ciertas operaciones y cerrarán algunos programas, medidas con las que la Cruz Roja Internacional desea centrarse en sus actividades en zonas de difícil acceso. Unas de ellas están próximas a las líneas de combate y áreas en disputa.
El CICR acumula varias peticiones de fondos de fin de año que se han cubierto y los costos se dispararon en el cuarto trimestre de 2022 por la inflación. Esto los llevó a empezar este año con un déficit de 140 millones de euros, reportó EFE.
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