Nayibe López miembro de la fundación Las Mercedes, que reúne a las madres de los privados de libertad en las cárceles del país, aseguró que la desatención “los está matando”, pues en lo que va de año han fallecido 10 de ellos por tuberculosis.
«Esto es por falta de alimentación, falta de una buena atención médica, porque hay muchos muchachos que son de otros estados. Si las madres que viven aquí les cuesta garantizarles la comida a sus familiares, imagínense las que se encuentran en otros estados», manifestó.
López indicó a Radio Fe y Alegría Noticias que cubren una gran parte de las cárceles del país, especialmente las del estado Lara, como los recintos penitenciarios Fénix, David Viloria y varias comisarías de la entidad.
Asimismo, precisó que las madres larenses muchas veces gastan entre 10 a 15 dólares en solo pasajes para trasladarse de sus hogares hasta la cárcel Fénix. “Una madre que tiene su hijo en otro estado le es imposible llevarle comida semanal”, dijo.
“Por esto es que la mayoría de los muchachos tienen tuberculosis. El 90% de los muchachos que están recluidos en Fénix y David Viloria, han perdido masa muscular y tienen fallas en el peso, porque la alimentación no es adecuada. Si dan desayuno, no dan almuerzo, y si dan almuerzo no dan cena”, destacó.
Madres en la lucha
López indicó que tienen alrededor de 12 años luchando para que se respeten los derechos humanos de los privados de libertad, pero como fundación tres años.
Asimismo, informó que en la fundación tienen alrededor de 400 madres, las cuales son atendidas 20 a 25 diariamente, semanalmente atienden unas 100 madres y familiares de privados de liberta, al igual que a niños y adolescentes encarcelados.
Destacó que la mayoría de las personas que se acercan a la fundación son mujeres, muy pocos hombres lo hacen, pues la mayoría de los detenidos o no tienen padre, o si los tienen deben trabajar, por lo que las madres procuran suministrarle lo que necesitan.
Manifestó que el andar de las madres de privados de libertad, es “ir a los tribunales para ver si los jueces dan respuesta”, así como también dirigirse a las cárceles y módulos policiales para darles comida y medicinas a sus familiares, inclusive artículos personales.
“Los familiares tienen que llevarles todo a los recintos carcelarios. Igualmente en las comisarías que es el caso más triste que tenemos, pues todos los días tienen que llevarle almuerzo a su familiar, estén como estén”, expresó.
Se quejó de aquellas personas que le preguntan por qué se preocupa por un privado de libertad, a ellas les recordó que aunque cometieron cualquier delito, siguen teniendo derechos humanos, “y los derechos humanos hay que respetarlos y hacerlos cumplir”.
Escuche la entrevista completa a Nayibe López, de la Fundación Las Mercedes, acerca de la situación de los privados de libertad en el estado Lara en: