Cientos de ciudadanos venezolanos aseguran que los despidieron de sus empleos en Trinidad y Tobago porque sus registros de inmigración vencieron el 1 de enero de este año y, hasta la fecha, siguen sin renovarse. Esto pese a la promesa de hace dos meses por parte del ministro de Seguridad Nacional trinitense, Fitzgerald Hinds, quien aseguró que los permisos de trabajo serían extendidos.
Las tarjetas de registro, equivalentes a un permiso de trabajo, expiraron a aproximadamente 13.000 venezolanos y esto los ubica en una situación de ilegalidad y, a su vez, el despido de sus lugares de trabajo.
El ciudadano Manuel Martínez expuso su caso en las redes sociales en donde contó que acudió a la División de Inmigración trinitense para hacer el debido proceso, pero los oficiales le dijeron: «no hay visas al momento», publicó la agencia EFE.
Martínez agregó que envió a un familiar a la Embajada de Trinidad y Tobago en Caracas y le dieron la misma información.
No dan razones
«La Embajada trinitense en Caracas no está entregando visas. Los oficiales dicen que el proceso solo se está llevando a cabo a través de Puerto de España», contó.
«Los venezolanos en Trinidad y Tobago continuamos con las manos atadas. No hay permisos de trabajo, educación para nuestros niños, los servicios médicos son solo para emergencias y sin visas de empleo para ver a nuestros familiares, tenemos que esperar por las tarjetas de registro», sostuvo.
Otra venezolana, Marlene Sosa, contó que solicitó visas para su madre, padre y dos sobrinos para que la visitaran al país vecino.
Sin embargo, Sosa dijo que recibió un correo electrónico de la División de Inmigración trinitense informándole que sus visas quedaron rechazadas sin explicarle la razón.
Sigue todas nuestras entrevistas y la información que se produce desde las regiones uniéndote a nuestro canal de Telegram.