La economía venezolana se redujo un 2,2% en el segundo trimestre de 2021, según reportó el Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF) en su más reciente informe. Las estimaciones indican que, hasta el mes de agosto de este año, la economía venezolana disminuyó 28%.
Este índice es menor al 33,7% que se registró en los primeros tres meses del 2021.
De esta manera Venezuela se mantiene por poco más de seis años con una economía en picada y la pérdida de más del 80% del Producto Interno Bruto (PIB), respecto al año 2012.
Esto se traduce en una reducción de la producción de activos en el país, así como en una «disminución de las remuneraciones de los trabajadores activos, pensionados y jubilados», sobre todo los del sector público, de acuerdo con el OVF.
Según el Observatorio Venezolano de Finanzas la situación impacta «de manera sustancial» en el consumo de los hogares que ya se veían afectados por la Emergencia Humanitaria Compleja de instalación lenta registrada por las organizaciones no gubernamentales desde 2014.
La banca es la más afectada
La política del encaje bancario ejercida por el Gobierno nacional y lo reducido de éste hace que el sistema financiero nacional sea el sector más afectado por la contracción económica que sufrió el país.
Por estas limitantes, las entidades bancarias no pueden financiar la expansión de la producción en Venezuela. El decrecimiento del sector financiero es de más del 55%.
Otros sectores que conforman el Índice Mensual de Actividad Económica, como el petrolero y el gubernamental, también «experimentaron disminuciones» en los últimos 12 meses.
El comportamiento de la actividad petrolera moderó su reducción y alcanzó un crecimiento del 2,4%.
El sector público, por su parte, experimentó una caída del 82,4% por la disminución del gasto real por la menor ejecución del gasto nominal gracias a la falta de ingresos y la inflación que vive el país.