A la escuela de Fe y Alegría Hermana Felisa Elustondo ubicada en el sector Tacarica de Tovar, Mérida, se le cayó una pared, producto de un deslizamiento de tierra este jueves 9 de septiembre. Pero lo que más le preocupa a sus directivos es el potencial alud que puede caer sobre toda la infraestructura.
La pared que se cayó afectó el espacio donde se encuentran los animales de cría de este centro educativo. Pero el probable derrumbe de un barranco contiguo a la escuela puede afectar otras áreas como talleres y salones de clase. La institución atiendo a más de 60 estudiantes de varias zonas del estado Mérida.
Miembros de la comunidad educativa solicitan a las autoridades locales del municipio Tovar una urgente atención para prevenir mayores males. La directora del centro educativo, Norma Contreras, también se une a este llamado.
Reportan que la entrada al plantel está totalmente bloqueada por escombros, piedras y palos. Además, reseñaron que el puente que comunica a la escuela con otros sectores también se cayó.
A dos semanas del deslave en el Valle del Mocotíes continúan apareciendo otras consecuencias producto de derrumbes, desbordamientos de ríos y fuertes lluvias.
El pasado 26 de agosto el profesor Ubaldo Briceño, director de otro colegio de Fe y Alegría en Tovar confirmaba que había quedado seriamente afectada la entrada al plantel. Para esos momentos, no había acceso al lugar debido a la alta cantidad de piedras y lodo acumulados.
Por fortuna dentro de las instalaciones no se percibían daños mayores. Pero dos semanas después la situación cambió. Vale recordar que en el deslave de 2005 se había registrado un hecho similar, así como meses atrás. Siempre que llueve mucho la tierra cede y se lleva todo a su paso.
