El Sacerdote Jesuita (SJ) Conrado Zepeda, director del Servicio Jesuita a Refugiados (SJR) en México, aseguró que para crear políticas que ayuden a disminuir los flujos migratorios hace falta escuchar a los migrantes a fin de atender sus necesidades.
En una entrevista que concedió este lunes 1 de agosto al programa De Primera Mano de Radio Fe y Alegría Noticias, Zepeda resaltó que «muchas veces» se aplican políticas internacionales desde los escritorios o desde los intereses económicos y políticos de cada país.
Para argumentar lo anterior, el SJ Conrado Zepeda puso como ejemplo el Pacto Mundial Sobre Migración, que a su juicio fue firmado por varios países, pero no tuvo una participación «activa» de «personas de base» que escucharan sobre lo que viven los migrantes.
«Aunque es un acto muy loable por parte de los gobiernos, no es vinculante. Se queda no más en las buenas voluntades de los propios gobiernos», dijo Zepeda en cuanto a la atención a las necesidades de los migrantes.
Indicó que es tan «complejo» el tema necesitan que diversos actores se siente n a dialogar y así llegar a un acuerdo sobre los procesos migratorios.
Hay que atacar el problema migratorio de raíz
El director del SJR en México advirtió que de no atacar las causas estructurales de la migración hacia Estados Unidos desde las comunidades de origen como: la falta de oportunidades, trabajo, educación, vivienda, generar recursos que permitan a las personas vivir de una mejor manera; la migración no solo permanecerá, sino que se incrementará.
«Cada vez hay una polarización mayor política-económica y donde creo que el factor principal tendría que ser la solidaridad para que haya una mejor distribución de recursos y que estos pudieran llegar a las comunidades originarias para que puedan desarrollarse. Eso sería lo mejor, lo que pudiéramos impulsar en conjunto. Pero se tiene que escuchar a las personas que conocen la situación para que estén conectadas con estas políticas de manera mucho más amplia», explicó.
Añadió que dichas políticas deberían tener una repercusión económica, social, inclusive religiosa, con el objetivo de disminuir los flujos migratorios que salen desde las comunidades de origen.
Escuche la entrevista completa con el director del Servicio Jesuita a Refugiados en México en: