La diputada Zaida Vahlis denunció que en el centro de reclusión de Guaiparo en Ciudad Guayana, Bolívar, hay hacinamiento e insalubridad. Esta situación está afectando a una población de, al menos 250 privados de libertad aunque este centro no tiene capacidad para albergar a esa cantidad.
Vahlis, miembro de la Comisión Permanente de Política Interior, Justicia, Garantías y Derechos Humanos del Consejo Legislativo del estado Bolívar, pudo constatar esta realidad luego de realizar una visita y recorrido por los pabellones de la sede del centro de Coordinación Policial de la Policía Bolivariana, ubicada en el sector Guaiparo, parroquia Dalla Costa de San Félix.
Según la diputada, hacinamiento, insalubridad y enfermedades en detrimento de los privados de libertad, es lo que se encuentra en la policía de Guaiparo, la cual se ha convertido en un centro receptor de detenidos, ante la falta de espacios en las penitenciarias del estado.
En este Centro de Coordinación Policial se encuentra el Centro de Reclusión Preventiva, constituido por 6 pequeñas celdas construidas para una capacidad máxima de 60 detenidos en total.
Sin embargo, se encuentran recluidos aproximadamente 250 detenidos. Según la estructura de este centro, no debería haber más de 10 personas en cada celda y en la actualidad hay más de 40.
Retardo procesal : otro problema a resolver
«Se puede observar que este grotesco hacinamiento constituye una violación de derechos fundamentales de los privados de libertad, ya que las causales del hacinamiento observado lo constituye el retardo procesal, contraviniendo lo dispuesto en el artículo 49 de la Constitución que establece el derecho al debido proceso, en cada una de sus etapas, desde el momento mismo de la aprehensión», resaltó la legisladora.
Sin alimentación ni salud
Asimismo, la diputada alertó que «la falta de alimentación o carencia de una adecuada conlleva a que muchos de los privados se encuentren en un grado de desnutrición que alarma».
En este sentido, asegura que la causa es que solo reciben una comida al día y eso porque son sus familiares quienes se las suministran y este no es el caso de todos los internos, pues incluso hay un grupo grande que no cuenta con el apoyo de sus familias por falta de recursos.
Además agregó, «la asistencia médica es precaria, como lo es la ayuda sicológica tan necesaria para lograr bajar los niveles de ansiedad y estrés que genera la situación de reclusión».
La insalubridad es otro de los factores negativos que destacó la diputada. La también abogada informó a Radio Fe y Alegría Noticias que el estado de insalubridad sumado al hacinamiento, genera que los detenidos estén expuesto a enfermedades contagiosas como la COVID-19, tuberculosis, VIH, sífilis, escabiosis, hepatitis, entre otras.
Posibles soluciones
Ante esta situación, Vahlis, resalta la necesidad de establecer políticas en materia penitenciaria que permitan un funcionamiento estructural y funcional de los centros de reclusión, lo cual amerita un plan de formación y capacitación que facilite la reinserción en la sociedad del privado de libertad una vez logrado el cumplimiento de la condena.
Otra propuesta de la parlamentaria para abordar la situación que denuncia es «aplicar políticas procesales de contingencia y dar celeridad a los procesos penales a través de la celebración de audiencias que permitan procesar delitos menores y casos puntuales que lo ameriten».
También recomienda establecer alianzas con instituciones de salud pública, que permitan la atención preventiva y de emergencias de salud en los privados de libertad. Concluyó que la idea sería brindar una asistencia integral que incluya atención sicológica y espiritual para estabilizar la salud menta de los reclusos.
Lo que dice el Observatorio Venezolano de Prisiones
El Observatorio Venezolano de Prisiones reveló en su informe anual del 2021 que el hacinamiento hizo estragos en las cárceles venezolanas.
El informe destaca que desde el año 2002 hasta el 2021 se cerraron 10 centros penitenciarios, por lo que el hacinamiento es el principal problema que existe en el sistema penitenciario de Venezuela.
El hacinamiento es crítico y alcanza un 159,9% y un 70% de retardo procesal. En el mismo informe se recuerda que Venezuela tiene 9 cárceles con medidas provisionales de protección dictada por la CIDH, pero hasta ahora el Estado no ha dado respuesta a ninguna de las denuncias por vulneración contra los derechos humanos de los privados de libertad.
