La caravana migrante que viaja por el suroriental estado mexicano de Chiapas chocó el jueves 04 de noviembre con la Guardia Nacional y con agentes del Instituto Nacional de Migración (INM).
El violento encuentro dejó varios arrestados y cinco funcionarios de seguridad «con lesiones de consideración».
El incidente se produjo en el tramo carretero que une a las poblaciones de Pijijiapan y Tonalá.
Los agentes federales se bajaron para implementar el operativo y el grupo de migrantes empezó a lanzar piedras a las fuerzas de seguridad.
En un comunicado, la Guardia Nacional señaló que «entre 100 y 150 personas migrantes pertenecientes a un grupo de más de 1.600 de diferentes nacionalidades» presuntamente los «agredieron con piedras y palos».
Imágenes de medios locales mostraron que, durante unos 10 minutos, al menos 50 migrantes lanzaron cientos de piedras y palos a la Guardia Nacional.
El comunicado aseguró que las autoridades «en ningún momento respondieron a la agresión».
10 días de camino
La caravana de migrantes pretende arribar a la Ciudad de México para regularizar su estancia.
Avanza en medio del dolor que ha ocasionado la muerte por disparos de la Guardia Nacional de un migrante cubano, quien viajaba en un vehículo junto con otras personas, el pasado fin de semana.
Este grupo, que lleva más de 10 días de camino, se puso en marcha luego de que en los primeros días de septiembre las autoridades mexicanas frustraran el avance de cuatro caravanas de migrantes que partieron precisamente desde Tapachula, municipio de Chiapas y fronterizo con Guatemala.
Desde entonces, varias agencias de la ONU y ONG criticaron el uso de la fuerza en los operativos para desintegrar dichas caravanas.
Fuente: dw
