«Nosotros estamos logrando aplanar la curva. Venezuela está logrando aplanar la curva de multiplicación de casos gracias a la cuarentena social voluntaria, consciente y radical que hemos tomado». Presidente Nicolás Maduro, 22 de marzo de 2020.
Ese fue parte del discurso oficial durante los meses de abril y mayo. En cada parte que ofrecieron, aseguraron que Venezuela había aplanado una curva que no había comenzado a formarse aún.
Y llegó junio.
«Venezuela se encamina al aplanamiento de la curva de infección a diferencia de otros países donde el crecimiento de la curva es exponencial. Y mucha gente nos ha preguntado qué quiere decir exponencial y básicamente es que de un día para otro día, los casos van a ir aumentando el doble de lo que aumentaron el día anterior». Vicepresidente Sectorial de Comunicación, Jorge Rodríguez, 27 de marzo de 2020.
Durante los 30 días del mes de junio murieron 37 personas a causa de la COVID-19, según cifras que ofreció el gobierno nacional. Esto representa, en promedio, 1,23 personas fallecidas por día.
Mientras que en todo el mes de mayo reportaron la muerte de 4 personas, en abril fueron 7 y en marzo, 3.
Las muertes de junio se registraron en los estados Lara, Zulia, Miranda, Distrito Capital, Sucre, Trujillo, Falcón, Mérida, Bolívar y Yaracuy, que no necesariamente ocupan los primeros lugares en cuanto a cantidad de casos confirmados.
Sin embargo, han tenido «focos» reportados y denunciados en mayor o menor proporción por los miembros de la Comisión Presidencial para el Seguimiento y Control de la COVID-19 a cargo de la vicepresidenta Ejecutiva de la República, Delcy Rodríguez.
Los primeros 20 días del mes tuvieron reportes de, máximo, 2 fallecidos por día, pero luego las muertes aumentaron aumentaron y pasaron a ser, en promedio también, de casi 3 reportes de muertes por día. Y así mismo empezó julio.
Fueron 26 hombres, 9 mujeres y dos de quienes no ofrecieron mayores detalles salvo que uno fue el quinto caso confirmado en el país y el otro, era un trabajador del sector salud del estado Zulia.
Los más jóvenes
Junio nos trajo la muerte de los dos casos más jóvenes que hoy día reporta el país. Si bien, la edad promedio entre 35 personas este mes (de dos no reportaron edad) es de 52 años, el lunes 1ro de junio reportaron la muerte de un niño de apenas 3 años de edad en el estado Lara.
Pasó sus últimas semanas recluido en el Hospital Pedriátrico Agustín Zubillaga de Barquisimeto, al que ingresó portando el virus. La autoridad única en salud de la entidad, Javier Cabrera, indicó que el pequeño “ya había salido de la fase crítica pero presentó cambios en su estado neurológico, hizo una disfunsión valvular” y murió por una subida de presión en el cerebro la noche del domingo anterior.
La segunda víctima mortal más joven de este virus en nuestro país vino derivada, según declaraciones del gobierno, del mercado Las Pulgas, el foco más grande que hemos tenido hasta la fecha.
Se trató de un joven de 29 años de edad, comerciante que había iniciado los síntomas el 1ro de junio y diez días después fue al hospital. Reportaron que era asmático pero no se controlaba su condición y falleció por una falla multiorgánica tras una insuficiencia renal aguda y neumonía bilateral.
Zulia peligroso
El estado Zulia encabezó la lista de fallecidos este mes, al reportar 16 de las 36 muertes que detallaron con ubicación.
Solo de una persona reportada el 09 de junio no se conoció sexo, edad, ubicación ni causas de muerte.
De estos 16 zulianos fallecidos, 8 fueron señalados directamente por algún vocero oficial de ser vecinos o comerciantes del mercado Las Pulgas, en el casco central de Maracaibo. El resto, aseguraron que eran trabajadores de salud, conductores de transporte público, trabajadores del terminal de Maracaibo o de empresas del Estado y pescadores.
Le sigue el Distrito Capital con 6 muertes en las parroquias Sucre, La Vega, El Recreo y El Paraíso y una sin identificar.
Luego estuvo Trujillo con la muerte de 2 personas vinculadas al foco del mercado Las Pulgas, y una tercera sin nexo epidemiológico reportado en Pampanito.
En Lara, Miranda, Falcón y Mérida se reportaron 2 muertes en cada estado, 6 hombres y 2 mujeres.
La segunda de las muertes reportadas en Mérida fue un médico pediatra reportado como la única víctima mortal el 27 de junio por contacto con casos positivos en El Vigía, municipio Alberto Adriani, donde días antes habían denunciado un foco de contagio derivado de una fiesta, rompiendo con las reglas de la cuarentena social.
Mientras que Sucre reportó la muerte de un señor por contacto con un viajero de Brasil, Bolívar de una enfermera jubilada del municipo Caroní y Yaracuy de un comerciante al inicio de un brote de contagio en el municipio Bruzual.
Al día siguiente de reportar la muerte de ese comerciante de Yaracuy, falleció su esposa también por COVID-19.
«Tenemos que estar en este empeño de aplanar la famosa curva. Quiero insistir en el esfuerzo de aplanar la curva. Hoy estamos a 23 de abril, aplanar la curva. Es lo fundamental. Ganar la batalla de la salud y la vida del pueblo de Venezuela». Presidente Nicolás Maduro, 23 de abril de 2020.
Fallas multiorgánicas
Esa fue de una de las causas de muerte que más se repitió en aquellos casos de los que dieron explicaciones.
Frases como «fue ingresado a UCI pero la evolución fue muy mala», «ya se encontraba en condición crítica», «avanzó muy rápido», «tuvo un deterioro muy rápido», resonaron en algunos partes de voceros oficiales.
De unos 12 casos no ofrecieron detalles de la causa de muerte, mientras que de otros 10, indicaron que estuvieron en Unidad de Cuidados Intensivos.
Unas 13 personas sufrían de hipertensión arterial, 6 de diabetes, pero de unas 14 no ofrecieron detalles de si padecían de alguna enfermedad de base y solo de 1 indicaron que no tenía ninguna.
¿Y julio?
El informe de la Academia de Ciencias Físicas, Matemáticas y Naturales, publicado el pasado 8 de mayo de 2020, alertaba un subregistro de casos desde el 63% y hasta el 95% de los pacientes sintomáticos hasta el 23 de abril.
«El escenario de la curva aplanada y un control total de la epidemia que se ha venido difundiendo es improbable a la luz de las proyecciones de los modelos epidemiológicos. Inclusive en un escenario con un subregistro bajo (poco probable) el número de casos que se esperan cada día está por encima del millar», indicaban.
Y, sin sonar alarmistas, alertaban ya ese mes de abril que «el país debe prepararse para el impacto que representa un número entre 1.000-4.000 casos nuevos diariamente durante el pico de la epidemia, que podría producirse entre junio y septiembre de este año».
Mientras que en mayo confirmaron 1.177 casos y 4 muertes en el país por COVID-19, para junio anunciaron 4 mil 322 casos y 37 muertes. La pregunta es, ¿seguirá subiendo la curva en julio?
