Tras el inicio de la cuaresma que comienza este 17 de febrero, la iglesia católica en Mérida celebró el miércoles de ceniza respetando las normas de bioseguridad.
Este año en medio de la pandemia y evitando el contacto directo con los feligreses, la imposición de cenizas no fue de forma tradicional, ya que antes acostumbraba, por parte del sacerdote, colocar una cruz de ceniza en la frente, sino que se dejó caer sobre la cabeza de los fieles luego de ser bendecida.
Ramón Rocha, coordinador del Secretariado de Catequesis de la Arquidiócesis de Mérida indicó a Radio Fe y Alegría Noticias que cada parroquia tendrá su horario de misas presenciales limitadas, igualmente de los medios de comunicación y redes sociales para transmitir esta ceremonia.
“La iglesia celebra el miércoles de ceniza, fecha en la que se inicia la cuaresma, tiempo de conversión y preparación para vivir el misterio de la pasión, muerte y resurrección del Señor, las parroquias acordarán su horario de misas presenciales bajo los protocolos de bioseguridad”, apuntó Rocha.
La catedral de Mérida recibió desde tempranas horas de la mañana de este miércoles a un número de fieles para asistir a las ceremonias que dieron inicio a las 7 de la mañana, seguidamente a las 9:00 am y 11:00 am, misas a las que solamente pudo asistir un limitado número de personas dentro del templo para evitar contagios del COVID-19.
La misa de las 11:00 am fue presidida por el Obispo Auxiliar, Monseñor Luis Enrique Rojas Ruíz, y fue transmitida por dos medios de comunicación regionales para que la mayoría de los fieles la pudieran seguir en familia desde sus hogares.
