Los comerciantes venezolanos se verán obligados a desembolsar 6 millones de bolívares ante la nueva exigencia del gobierno de instalar nuevos equipos de fiscalización.
Sin embargo, el presidente de Consecomercio, Felipe Capozzolo, aseguró que será un monto “exigente y difícil de pagar” para cualquier comerciante.
Informó que solicitaron al Ejecutivo Nacional, a través del Seniat, derogar de forma inmediata la providencia que obliga a los comerciantes a renovar equipos por otros.
Capozzolo destacó que el sector comercio está en la disposición de cumplir con las normas legales pero el cambio de equipos es inviable en la actual Venezuela.
Manifestó que los comerciantes están dispuestos a asumir el costo, siempre y cuando, el gobierno los ayude con una acción crediticia que les permita cubrir el costo de las nuevas máquinas fiscales, sin que el egreso afecte la estructura financiera de sus negocios.
El presidente de Consecomercio insistió en la urgencia de derogar la providencia que obliga a renovar equipos, de lo contrario, muchos comerciantes serán sancionados por no poder cumplir con la ley.
Los más vulnerados serán los pequeños y medianos comerciantes que, a juicio de Felipe Capozzolo, no podrán asumir el egreso de 6 millones de bolívares, equivalentes a 300 dólares al valor cambiante de la moneda extranjera hasta este lunes 23 de septiembre.
