Marianna Mavárez, delegada gremial del Colegio de Nutrición y Dietética del estado Zulia, advirtió que “no existe una dieta universal”, por lo cual es importante acudir a un profesional que elabore un plan alimenticio adecuado a la persona, en el que se consideren sus aspectos metabólicos y si posee enfermedades de base.
Durante una entrevista en el programa De Primera Mano TV de Radio Fe y Alegría Noticias, la nutricionista expresó que los venezolanos, especialmente los zulianos, tienen malos hábitos alimentaciones porque consumen con frecuencia frituras, salsas y harinas, lo que aumenta el riesgo de hipertensión, diabetes e hígado graso, entre otros.
Resaltó que, desde el desayuno, optan por frituras como pastelitos, empanadas o tequeños, acompañados además de refresco. En el almuerzo, no faltan las tajadas o patacones y en la cena suelen “inventar” comidas full de salsas y grasas.
Cambios progresivos hacia hábitos saludables
Para mejorar la salud, Mavárez recomendó cambiar hacia una dieta balanceada, en la cual la mitad del plato se llene de frutas y vegetales, y la otra mitad de proteínas (animales o vegetales) y carbohidratos.
Exhortó a consumir frutas enteras en lugar de jugos, para evitar el exceso de azúcar, y sustituir los carbohidratos como arroz, pasta y harina precocida por alternativas más saludables como papa, auyama y apio, los cuales también son más económicos.
Mencionó como alternativas nutritivas preparar arepas de yuca o plátano y hacer empanadas o tequeños en el airfryer, para reducir el uso de aceite. A su vez, reemplazar la mayonesa de las ensaladas por yogurt natural.
A quienes preparen arepas de harina precocida, declaró que se le puede agregar vegetales a la masa o rellenarlas con atún o sardina.
En el caso de los niños, aconsejó enviarles jugos naturales en lugar de procesados y que las meriendas consistan en frutas, evitando dulces o chucherías.
Para no hacer sacrificios extremos, Mavárez recomendó tomar un “día libre” a la semana, para consumir sus comidas favoritas de manera controlada. “Yo no coloco una dieta rigurosa a la primera, siempre trato de hacerlo a progresión”, detalló.
“Si tenemos una alimentación balanceada vamos a tener muchos beneficios, uno puede levantarse con más ánimos, el metabolismo se acelera y nuestro aspecto físico cambia”, puntualizó.
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