El despido de Ozzie Guillén duró lo que tarda un respiro, fue despedido y reenganchado el mismo día.
Bastaron algunas horas de tristeza, desilución, resignación, algo de melancolía y desahogo a través de Instagram para luego girar a un evento inesperado. El retorno con Tiburones de La Guaira.
No hay una explicación ni detalles del nuevo acuerdo, ni condiciones, o si hay algún tipo de convenio momentáneo. Un mientras.
Lo cierto es que «Ozzie» fue despedido, y recontratado. Fue reenganchado en el cargo, como suelen decir en Venezuela.
Con la diferencia, que en el caso de un trabajador venezolano difícilmente es contratado de nuevo por su antiguo patrón en cuestión de horas y sin explicaciones.
Cosa de Tiburones y Ozzie. Volvió y deberá tratar de hacer que el conjunto del litoral salga de la fosa.
Ozzie y Tiburones viajarán juntos a Macuto, así lo dijo el patrón de Tiburones, Wilmer Ruperti en Instagram.
Lo único que puede explicar el retorno Guillén es la decisión de Ruperti en su condición de propietario.
Por cierto, el gerente general de Tiburones, Alberto Díaz, y todo indica que ahí hubo una fricción que no se pudo subsanar. Según la prensa deportiva, Díaz fue despedido por cesantear a Guillén.
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