En el marco del Día del Maestro, el padre José Gregorio Terán, sj, director de Fe y Alegría Venezuela, afirmó que los docentes en el país sacrifican sus intereses personales para ponerse al servicio de los estudiantes, lo cual ve como positivo coyunturalmente, pero negativo estructuralmente.
En una entrevista concedida al programa De Primera Mano de Radio Fe y Alegría Noticias, el padre Goyo destacó que la educación en Venezuela se sostiene gracias al compromiso y la vocación de los educadores.
“Si fuese por cuestión de cálculo entre lo que dan y lo que reciben, realmente la educación en el país no existiría”, enfatizó.
Fe y Alegría, según el sacerdote jesuita, es un ejemplo claro de cómo el trabajo en equipo en medio de las dificultades puede maximizar los recursos y las capacidades individuales.
Los docentes tienen el rol de humanizar
Terán recordó que el papel fundamental del maestro es humanizar, lo cual es primordial para alcanzar un mayor nivel cultural.
El director de Fe y Alegría Venezuela también subrayó que la acción dentro del aula trasciende más allá del simple conocimiento, posibilitando que los estudiantes puedan hacer lo que quieran. “La educación es sacar lo mejor de la persona, todas las bondades de ese diamante en bruto”.
A su criterio, resignificar la educación en Venezuela implica la existencia de individuos con consistencia personal, capacidad de decisión, compromiso ciudadano, resolución de problemas y vida comunitaria.
Sin estos elementos, advirtió que no hay sociedad ni modelo que pueda sostenerse. “La educación no solamente te forma como persona, sino que es la base para que todo sistema social, económico y político tenga consistencia”, reiteró.
Alianza por la Educación
En relación con la iniciativa “Alianza por la Educación” lanzada en enero de 2022, el padre Terán explicó que prioriza la implementación de una escuela virtual para mitigar la escasez de educadores, la recuperación del rol docente con una capacitación adecuada, la reivindicación de las condiciones de trabajo y una renovación económica productiva en el país.
El sacerdote recordó que en Fe y Alegría la crisis siempre ha estado presente, pero que han trabajado con fuerza de convicción y con el acompañamiento de Dios.
Señaló que en estos momentos de dificultad la meta sigue siendo la misma: tener estudiantes preparados, escuelas abiertas y funcionando, educadores comprometidos y bien atendidos con condiciones económicas, sociales y de vida dignas.
“La invitación es a levantar nuevamente nuestros sueños, aunque en este momento haya nubes no olvidemos que tenemos que subir a esa montaña de vida, de sociedad segura, libre, democrática y humana donde se viva a gusto”, manifestó.
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