Este domingo 26 de septiembre el papa Francisco pidió «un mundo cada vez más inclusivo» en la plaza de San Pedro, con motivo de la Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado.
«Estamos llamados a construir un mundo cada vez más inclusivo, que no excluya a nadie», dijo la máxima autoridad de la Iglesia Católica desde una ventana del palacio apostólico, tras la tradicional oración del Ángelus.
De acuerdo con el portal Deutsche Welle, el sumo pontífice dijo que es necesario caminar juntos, sin prejuicios y sin miedos, poniéndose junto a quien es más vulnerable: migrantes, refugiados, desplazados, víctimas de la trata y abandonados.
Francisco pidió a los fieles y a los turistas que fueran a contemplar una escultura instalada en la plaza de San Pedro en septiembre de 2019 y que representa a 140 emigrantes de diversos países, religiones o épocas históricas, en una barca.
«No cerremos las puertas a su esperanza», dijo.
Deportaciones y manifestaciones
Las declaraciones de la máxima autoridad de la Iglesia Católica se producen luego de que migrantes, en su mayoría haitianos, que acampaban debajo de un puente internacional en Texas, lo que se conoce como la frontera México-EEUU, abandonaron el lugar el viernes 24 de septiembre.
De acuerdo con cifras oficiales, desde el 9 de septiembre los guardias fronterizos interceptaron a cerca de 30 mil personas sin papeles en la pequeña localidad de Del Rio, donde vivían en condiciones insalubres y soportando altas temperaturas luego de cruzar el río Bravo desde Ciudad Acuña.
Alejandro Mayorkas, secretario de Seguridad Interior de Estados Unidos, informó que hace menos de una semana había unos 15 mil indocumentados allí..
Agregó que unos 8 mil regresaron voluntariamente a México, más de 5 mil fueron trasladados a centros estadounidenses de procesamiento de migrantes a lo largo de la frontera y aproximadamente 2 mil fueron deportados a Haití en 17 vuelos.
Este sábado 25 de septiembre, En Chile, centenares de manifestantes se reunieron en las calles de Iquique, para manifestar en contra de los migrantes.
De acuerdo con medios de comunicación chilenos las personas quemaron las pertenencias de los los refugiados, que en su mayoría eran venezolanos.
Esta acción ocurre un día después de que cientos de ciudadanos extranjeros fueron desalojados desde la Plaza Brasil, en Iquique, por fuerzas policiales.