Unos 160 venezolanos, en su mayoría deltanos, han sido afectados por las inundaciones producto de las fuertes precipitaciones de los últimos días, en las regiones de Penal y Morne Diablo de Trinidad y Tobago.
Algunos venezolanos, que también poseen nacionalidad trinitaria, han salido a estas residencias para ayudar a los criollos vulnerados. De acuerdo con una deltana de la vecina nación, existe desesperación entre los afectados tanto locales como inmigrantes.
La deltana relató que el pasado jueves 12 de diciembre por la noche fueron abordados violentamente por trinitarios, cuando ella, junto a un grupo de voluntarios de la iglesia católica, buscaban ayudar a los venezolanos. Los manifestantes sostenían que también debían ser atendidos. Esta traba fue superada posteriormente cuando el gobierno de Trinidad y Tobago gestionó ayuda humanitaria para los ciudadanos locales.
La mayoría de los venezolanos afectados por las inundaciones son de Tucupita, estado Delta Amacuro. Las iglesias católicas locales instan a realizar donativos de agua y alimentos no perecederos.
