Habitantes y productores de las parroquias San Camilo y Rafael Urdaneta del municipio Páez iniciaron trabajos de canalización del río Sarare para mitigar daños al puente principal que comunica a esta zona del Alto Apure con el resto del país.
Bajo el esquema de organización comunitaria donde aportan todos los sectores que hacen vida en estas dos parroquias, se estima que dichos trabajos tendrán una inversión de unos de 60 millones de pesos colombianos, es decir, unos 17 mil dólares americanos.
Por lo pronto, de parte de los entes gubernamentales, como la alcaldía de Páez y la gobernación de Apure, solo han gestionado la consecución de una máquina retroexcavadora con PDVSA y algo de combustible.
El señor Luis Hernández destacó a través de Radio Fe y Alegría Noticias que se ejecutarán dos fases de los trabajos. Una, consistente en la canalización, del río, que es donde se encuentran hasta ahora y posteriormente se llevarán a cabo los trabajos de fortalecimiento de las bases del puente sobre el río Sarare, siendo principal preocupación de los productores y particulares de la zona, ya que quieren evitar una «tragedia» vial cómo la que ocurrió con el puente Burgua, hace 4 años, que dejó incomunicada a la población de El Nula con el resto del estado Táchira y otras zonas.
Cabe destacar que los trabajos emprendidos por los propios ciudadanos de estas dos parroquias no solo buscan proteger la estructura del puente, sino también prevenir, en lo que se pueda, el socavamiento de la única carretera del sector para minimizar las pérdidas constantes de la producción agrícola y ganadera tras la arremetida del río en las últimas semanas.
Vale recordar que el pasado 7 de junio habitantes de esta zona productora del estado Apure alertaban por los micrófonos de Radio Fe y Alegría Noticias a las autoridades locales y regionales que «la situación es alarmante puesto que el río Sarare se ha desbordado 100 metros a la altura del puesto del ejército, y esto es preocupante porque si sigue desbordándose se va a quedar aislado el puente sobre el río», lo que afectaría a más de 400 productores y más de 2 mil familias de estas zonas rurales.
