Madres y grupos feministas de República Dominicana salieron a protestar exigiendo justicia tras la desaparición y muerte de una menor de 9 años de edad en Santo Domingo.
«La policía lo que está es jugando con el dolor de las madres de esta comunidad y de la familia de esa niña», expresó una de las manifestantes.
La Dirección Central de Investigaciones Criminales y la Unidad Canina de Operaciones Especiales detuvieron en su residencia a Esterlin Francisco Santos, alias El Panadero, quien confesó haber asesinado a la pequeña Liz María Sánchez después de abusar sexualmente de ella.
El fiscal principal de Santo Domingo Este, Milcíades Guzmán, informó que un tribunal impuso 18 meses de prisión preventiva contra Santos.
«No descansaremos hasta encontrar el último requisito necesario para hacer que ese hombre pague ante la sociedad dominicana, un crimen horroroso que no tiene descripción», dijo Guzmán a medios locales.
Aunque las autoridades no han dado con el cuerpo de la pequeña, el hombre dijo haberlo arrojado al mar Caribe en un saco lleno de piedras, por lo que se iniciaron las labores de búsqueda y levantamiento en esas aguas.
Le prometió un celular
Según los primeros detalles recopilados por el Ministerio Público, Liz María fue a casa del imputado cerca de las 11:00 de la mañana del domingo 16 de agosto, en busca de un celular que él prometió regalarle.
Allí, Santos cometió los crímenes de los que se le acusa.
La madre de la pequeña confesó que no se ha atrevido a salir de casa a participar en las labores de búsqueda por temor a represalias, pues en su comunidad le acusan de ser la responsable de la muerte de la menor por dejarla salir sola de su casa.
