Oración de la mañana. Viernes 23 de julio de 2021.
Por Herlinda Gamboa. Narra Julitze Mayurel.
Cafecito de la esperanza en camino de conversión
Señor Jesús, eres la vid verdadera, y tu Padre es el viñador. Todo sarmiento que no está en ti no da fruto, y es preciso cortarlo y todo el que da fruto, lo limpias, para que dé más fruto. Qué hermoso escucharte y sentir tus cuidados, tus gestos de misericordia y bondad. Siempre nos das la oportunidad de crecer, de estar limpios gracias a la Palabra que nos anuncias. De permanecer en tu amor, porque tu siempre permaneces en nosotros.
Lo mismo que el sarmiento no puede dar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid; así tampoco nosotros sin ti. En nuestro café compartimos tu testamento personal, nos lo dejas antes de entregar tu vida por todos. Esta mañana se respira un ambiente solemne y contradictorio. La viña uno de los cultivos preferidos en Palestina, se convierte en la imagen preferida de tus parábolas. Esta vez le das su sentido pleno, simboliza al gran árbol de la humanidad entera: todos los que aceptan ser hijos de Dios.
La Iglesia es, como la vid, un organismo vivo, tú eres su fuente de vida. Solo en esta unión íntima lograremos ser fecundos. Formamos parte en la medida en que estamos unidos a ella y compartimos su vida íntima. Este es el secreto de su vitalidad. Al resucitar te transformas en la vid llena de vida y de fuerza. Y nosotros nos convertimos en sus ramas. El único camino para que nosotros podamos más es la poda que vas haciendo, que nos purifica del egoísmo y de todo aquello que nos impide producir fruto en abundancia.
Danos tu amor y gracia que eso nos basta. Amén. PAZ Y BIEN.
Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.
