El excombatiente de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, Uriel Valencia Ochoa, fue asesinado la semana pasada en Quibdó, departamento del Chocó, en Colombia.
Así lo denunció el partido político FARC a través de su cuenta de Twitter, en un mensaje que recordó que Valencia había iniciado su proceso de «reintegración» en uno de los llamados Espacios Territoriales de Capacitación y Reincorporación.
«En Quibdó, asesinaron a Uriel Valencia, quien inició su proceso en el ETCR Vigía del fuerte, suspendido unilateralmente por el Gobierno. En esta zona existe presencia de las llamadas «AGC», que pintaron sus iniciales en más de 60 municipios del país. 231 sueños apagados», dice el mensaje.
La organización política acusó a las autodenominadas Autodefensas Gaitanistas de Colombia, AGC, que según el mensaje publicado han marcado su presencia en 60 ciudades de Colombia.
Entre los lugares marcados figuran varios de la zona norte de Colombia como Chocó, Antioquia, Córdoba y Cundinamarca.
Con el asesinato de Uriel Valencia, el número de excombatientes asesinados después de la firma del Acuerdo de Paz de 2016 asciende a 231.
