Las autoridades de Estados Unidos anunciaron este miércoles 12 de octubre nuevas medidas para controlar la migración de venezolanos que incluye la expulsión inmediata de quienes entren al país ilegalmente a través de la frontera con México.
El Departamento de Seguridad Nacional indicó que las deportaciones a migrantes venezolanos ilegales serán llevadas a cabo bajo el Título 42. Esta es una normativa de salud pública impuesta al inicio de la pandemia por el expresidente Donald Trump.
Según señalaron fuentes del gobierno estadounidense a periodistas mediante un llamada de prensa, las medidas se toman para reducir la migración irregular. Así como «para que la gente venga de forma segura y ordenada».
“Nuestro esfuerzo integral para reducir la migración irregular de venezolanos también incluye un nuevo proceso para traer legalmente y de forma segura hasta 24 mil venezolanos a los Estados Unidos”, dijo el Departamento de Seguridad Nacional.
No obstante, la medida no se aplica a quienes hayan entrado antes del anuncio. Además, según indicaron, Estados Unidos no implementará este proceso si no cuenta con el apoyo de México para recibir a los migrantes deportados.
Por otro lado, las medidas también disponen de un programa que da estatus legal por dos años a esos 24 mil venezolanos que califiquen. Uno de ellos es que los interesados en ingresar a Estados Unidos deberán demostrar que tienen un patrocinador dentro del país. El mismo debe demostrar tener los recursos financieros para sostener al solicitante que vaya a residir allí.
Inclusive, los solicitantes deberán pasar rigurosos controles biométricos y biográficos de seguridad nacional y seguridad pública. También deberá tener su esquema de vacunación completo.
Explicaron que no entrarán venezolanos que hayan recibido una orden de expulsión de los Estados Unidos en los cinco años anteriores y si han cruzado sin autorización entre puertos de entrada después de la fecha del anuncio. Tampoco si han ingresado irregularmente a México o Panamá después de la fecha del anuncio y si no han completado los requisitos de salud pública. Así lo indicó el Departamento de Seguridad Nacional estadounidense.