Aunque de la lista de 110 personas que recibieron indultos este lunes, solo 50 efectivamente estaban detenidos, esto igual confirma que en Venezuela sí hay presos por razones políticas.
Es la visión que compartió el abogado, Alí Daniels, quien en entrevista para Radio Fe y Alegría Noticias destacó que la liberación de personas bajo la figura de indulto, es un reconocimiento a que sí hay presos políticos.
Daniels, quien además es director de la organización Acceso a la Justicia, compartió las cifras que este viernes dio a conocer el Foro Penal que afirman que el resto de los nombres en dicha lista de indultos solo estaban siendo investigados o están en el exilio.
Recordó que en el país siguen detenidas más de 300 personas por motivos políticos y pidió que su liberación «no se deba a una coyuntura por el tema electoral porque además eso no está resuelto. Pensar que las personas que fueron liberadas, mañana van a ser postuladas, les informo que eso no es así».
El abogado además reiteró que los partidos políticos a los que pertenecen algunas de las personas liberadas este lunes, como Voluntad Popular, Acción Democrática y Primero Justicia, aún están intervenidos por juntas directivas ad hoc designadas por el Tribunal Supremo de Justicia.
«De modo que para postularse, usted tiene que serlo por un partido que no puede porque la represión ha llegado a esos niveles donde ni siquiera se tienen partidos de oposición y en consecuencia todavía queda mucho por hacer para poder decir que ya se pueden ir a elecciones en un proceso libre y democrático», acotó.
Liberaciones deben ser celebradas
Tras los anuncios de indultos hechos este lunes 31 de agosto, el abogado Alí Daniels indicó que «como defensores de derechos humanos tenemos que estar muy alegres, sobretodo por casos de personas que han sido liberadas porque ni las cárceles de presos comunes o presos políticos reúnen los mínimos requisitos para la dignidad humana».
Sitios donde además muchos de ellos recibieron malos tratos y torturas físicas.
«Esto tenemos que celebrarlo porque estas personas nunca debieron ser perseguidas o detenidas», dijo durante la entrevista a Radio Fe y Alegría Noticias.
Señaló casos en los que hubo «injusticia sobre injusticia» como el de Antonia Turbay «cuyo único delito era ser vecina del señor (Iván) Simonovis y que desde julio del año pasado tenía una orden de excarcelación que no había sido ejecutada».
Sin embargo, explicó que según nuestro ordenamiento jurídico, el hecho de que una persona sea indultada no implica que ésta reconozca haber cometido ningún delito. Tampoco la autoridad que lo emite reconoce culpa alguna.
«Simplemente se extingue la acción penal y a partir de allí la persona está libre y no tiene que reconocer ni hacer ninguna acción que lo someta al escarnio público», agregó
Indultos pueden abrir paso al diálogo pero falta
Sobre si los indultos puedan abrir las puertas al llamado diálogo nacional, Daniels comentó «ojalá sea el caso, en el sentido de que nosotros como miembros de la sociedad les exigimos, no solo al gobierno sino a todos los sectores políticos, que se llegue a un gran acuerdo nacional que se cimente las bases para hacer unas elecciones».
Aseguró que para lograr una solución democrática y pacífica, hace falta un gran acuerdo nacional que quizás puse pueda iniciar a través de estas liberaciones «pero que no bastan».
«Hay que establecer reglas claras del juego que permitan que todos los que puedan y deban participar, lo hagan de una manera libre y que además los venezolanos, en un ambiente de libertad, podamos votar y elegir», aclaró.
Sobre esto último, explicó «ahora podemos votar pero no podemos elegir porque los partidos de oposición están intervenidos, por que las reglas electorales están ultrajadas».
También destacó los cambios que ha hecho el Consejo Nacional Electoral con respecto a la representación indígena al eliminarles el voto directo y secreto que luego enmendaron y solo perdieron el primero, porque ahora es una elección de segundo grado.
«Pero algo peor que eso es el hecho de que a los demás partidos se les exigió la paridad de género pero se exceptuó a la mujer indígena. Hay una discriminación terrible que a mi me duele y tiene un piso de racismo terrible, según el cual, todas las mujeres venezolanas tienen más derecho que la mujer indígena en estos momentos», argumentó.