Dos pasarelas metálicas en un callejón del barrio El Cementerio, en San Juan de los Morros, están a punto de colapsar. Por este lugar, a diario, transitan personas, niños y adultos mayores para ir a diferentes zonas de la ciudad.
Dave Benaventa, uno de los afectados, señaló que a las pasarelas no se les hace mantenimiento desde hace años.
“A las pasarelas como tal se les hizo mantenimiento si no mal recuerdo cuando Guerratana (exalcalde), pero mantienen las mismas bases y eso ya se puso peor. Hay unas escaleras que hay que agarrarse con cuidado”, comentó.
Manifestó que las escaleras han ido cediendo por el agua que le cae a la quebrada e inunda las bases que vienen colapsando con el tiempo. “Ya la loza se despegó con la oxidación del tiempo y hay que pasar con cuidado”.
Benaventa denunció que otro de los problemas que presentan en la zona es la falta de recolección de basura, que no se llevan los artefactos dañados y las personas los lanzan a la quebrada.
“El problema con la quebrada es que el aseo, cuando pasa, no se lleva los colchones, lavadoras viejas, televisores, microondas, y muchas personas de la parte de arriba tiran ese desperdicio. Cuando es verano eso se va almacenando y cuando viene el invierno eso se tapa y causa inundaciones”.
Por su parte, José Espinoza, vecino del sector, declaró que en la quebrada que pasa por sus casas arrojan aguas servidas y cuando crece el cauce se mete a sus hogares.
“Bajan todos los desperdicios. Embaulamos aquí y los reales (dinero) no alcanzaron. Yo mandé una carta a la alcaldesa para ver si podíamos picar ese tubo porque ese tubo se tiene que picar a juro, porque si no lo sellamos va a pasar lo mismo, se va tapar y va inundar las casas”, señaló.
Espinoza agregó que también están exigiendo que se les coloque una alcantarilla al embaulamiento que le hicieron a la quebrada, donde a diario pasa gente caminando y varias se han caído porque no tiene ninguna protección. “Personas que no son de aquí y que van para allá se han caído”.
Paredón a punto de caer
Lenin Olivo, habitante de la comunidad, denunció que un muro de piedra que tiene en la parte de atrás de su patio está a punto de caer por la cantidad de aguas negras o blancas que bajan de un ambulatorio que está construido al lado de su vivienda.
“Se está debilitando y filtrando. Cada vez que se daña la tubería de aguas blancas o negras del ambulatorio se me filtran para la casa. Tengo niños pequeños en la casa. Ya he ido a varios sitios y de verdad no me han solucionado para nada”.
Olivo aseveró que esas aguas han originado enfermedades respiratorias por los malos olores que salen de las cañerías dañadas.
“Eso me ha generado mal olor, enfermedades y ahorita entra el dengue con la plagas y las moscas. Hay que estar pendiente porque tengo niños en casa”, indicó.
La afectada hizo un llamado a las autoridades para que solucionen la situación que pone en riesgo a su vivienda y familiares.
“Que me solucionen eso. No sé qué irán a hacer ellos allí… si cerrar el ambulatorio o no, porque de verdad eso está cediendo”.
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