Nuevos ataques de Rusia contra la región de Lugansk, en el este de Ucrania, provocó en las últimas horas, al menos 6 muertos.
Así lo anunció el jefe de la Administración Militar Regional de Lugansk, Serhiy Haidai, en una publicación en su canal de Telegram, según EFE.
«El enemigo fue expulsado de Zolote, seis civiles murieron en Lisichansk y Severodonetsk. El número de ataques del ejército ruso crece cada día», dijo.
Según indicó, el número de casas y de infraestructuras dañadas continúa creciendo, mientras «el área libre de invasores está disminuyendo».
En esta situación «el enemigo solo busca intensificar el fuego, matando a civiles», denunció.
Muerte y destrucción
Los rusos han redoblado sus ataques en las regiones de Donetsk y Lugansk, para establecer un corredor que les permita desplazarse por esta zona.
Lugansk, desde hace un mes, es castigado, apenas resisten varios centenares de militares y civiles atrincherados en las instalaciones de la planta química Azot.
«Otro ataque aéreo destruyó un hospital, donde también se refugiaban personas. Un residente local fue asesinado en otro bombardeo en la calle”, escribió el funcionario.
Además, los bombardeos rusos destruyeron una escuela y dos viviendas en Lisichansk, así como 18 viviendas en las cercanas Hirske y siete en Vrubivka.
Muchos edificios en el pueblo de Synetske cerca de Severodonetsk también resultaron dañados.
