¿Y la segunda dosis de la Sputnik V para cuándo?

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Cargamento que llegó a Caracas, Venezuela el 29 de marzo de 2021. Foto: REUTERS / Manaure Quintero

El gobierno nacional, para contrarrestar la ola de contagios de la COVID-19, decidió iniciar una fase de inmunización con la vacuna rusa Sputnik V, que según declaró el presidente Nicolás Maduro, en febrero de este año, invirtió 200 millones de dólares para adquirir 10 millones de estas dosis rusas.

Pero esas 10 millones de vacunas no las llegaron a ver los venezolanos. Solo una reducida tasa de personas fue inoculada por la primera dosis de Sputnik V, pero… ¿y la segunda?

Las personas se preguntan: ¿dónde está mi segunda dosis? Diversas denuncias corren por las redes sociales con alarmante preocupación porque el Estado no emite ninguna información y el tiempo pasa agotándose la eficacia.

Aunque Rusia informó que el tiempo de inoculación entre la primera y segunda dosis puede ser de hasta 180 días, la mayoría de los venezolanos siente frustración por lo lejano que puede ser la aplicación de la segunda dosis o que no se la apliquen jamás. 

El silencio y la falta de datos sobre la llegada de un nuevo lote de vacunas mantienen a la población bajo «incertidumbre» y «preocupada», así lo indicó en conversación con Radio Fe y Alegría Noticias el director de la ONG Médicos Unidos, Jaime Lorenzo.

El director de la organización también dijo que este error de gestión no se produciría si el plan lo hubieran hecho ordenado y público.

«Si usted tiene un plan de vacunación, debe tener la seguridad de, si van a ser dos dosis, tener las segundas dosis suficientes para cubrir lo que estabas haciendo», señaló Lorenzo.

El Gobierno ya ha explicado que si hay retrasos que afectan el proceso de vacunación, pues las sanciones de Estados Unidos dificultan la llegada de los fármacos hechos en Rusia y hasta inciden en los acuerdos del mecanismo Covax.

Evidentemente, la fase de vacunación no se detiene, debido a que ahora para todos la vacuna disponible es la fabricada en China denominada Sinopharm, conocida como Vero Cell entre los ciudadanos porque así lo escribían las enfermeras, sin especificar el producto. Sin embargo, la fase avanza con lentitud y “desorden”.

Más de un mes esperando la segunda dosis

Ante la incertidumbre, Radio Fe y Alegría Noticias conversó con varias familias para conocer sus casos al respecto de la situación con la segunda dosis que se mantiene desaparecida en el país.

Ladys Ojeda, de 69 años, con bastón en mano y con deficiencia visual acudió el sábado 12 de junio acompañada de su hija a la Villa Deportiva en Maracaibo, estado Zulia, donde luego de esperar dos horas recibió su primera dosis con la Sputnik V.

La segunda dosis estaba fijada para el 3 de julio, pero la rebotaron al llegar al lugar. “Fui hasta la Villa Deportiva y me informaron que la segunda dosis aún no había llegado al Zulia y que iba a llegar pronto porque ya estaban en Caracas, pero nada. Me dijeron que sería llamada por Patria y por mensaje de texto. Tengo más de un mes esperando la segunda dosis”.

La señora Ojeda impaciente se trasladó al vecino país, esperanzada de que pudieran ponerle la vacunación completa.

“Me fui a Colombia a ver si me colocaban la segunda vacuna y me dijeron que no porque allá no colocan la Sputnik porque de esa no llegaron”.

“Tengo que esperar más de tres meses para iniciar el protocolo con otra vacuna, eso me dijeron los médicos colombianos, o esperar la aprobación de la OMS a ver si la rusa se puede combinar con la Astrazeneca”, dijo con pesar lamentando que por esa razón regresó a Venezuela y está esperando el llamado “con el favor de Dios”.

«Estamos preocupados»

La estudiante universitaria Gissell Villegas también compartió la historia de su papá Levis Villegas de 68 años, quien igualmente está esperando la dosis. “Papi se la quiere poner, está preocupado. Yo pregunté si se podía poner la china y me dijeron que no. Yo pregunté por qué no ha llegado la de Rusia”.

“Ya pasaron los 20 días que le tocaban a él, pero me dijeron que es entre 20 a 90 días y apenas lleva un mes. No ha llegado y no se sabe cuándo va a llegar.  Yo estoy preocupada por él, por mi papá”, manifestó la joven.

A falta de Sputnik, la china

Las personas de la tercera edad en un principio eran las priorizadas para colocarse la vacuna rusa, mientras que las personas menores a los 60 años recibían la china Vero Cell que produce la farmacéutica Sinopharm. Eso cambió por completo.

“Se vacunó con la china aunque es una persona de la tercera edad”, indicó una persona que no quiso revelar públicamente su nombre sobre el caso de su mamá.

“Salimos a las cinco de la tarde. Había más de mil personas en la cola. Estaban pasando lotes de 60 personas, pero era demasiada gente, muchos ancianos, enfermos. Menos mal que el sol no estuvo tan fuerte”, contó sobre la segunda experiencia que pasaron juntos desde su llegada a las 7:00 a. m. al centro de vacunación en San Francisco, Zulia.

Detalló que la primera vez que fueron fue rápido. Sin embargo, en la última se notaba “la falta de organización”. Además, informó que otros centros de vacunación afecta el proceso porque en la ciudad solo hay uno habilitado. “Todas las parroquias de San Francisco son atendidas ahí”.

Plan calificado como «despelote»

Lo mismo reseñó José Iriarte, profesor y médico con 74 años de edad, quien señaló que el problema está en la cantidad de personas que están citando en San Francisco: “Actualmente el problema se agrava porque están viniendo personas inclusive desde otras zonas, porque se están metiendo por la página Patria y por la de Secretaría de Salud. Entonces, por lo tanto, hay demasiadas personas”.

“Deben organizarse mejor porque ahorita sí es verdad que es un verdadero, valga la redundancia, despelote”, expresó sobre las recurrentes y prolongadas colas que se forman.

Iriarte también acotó que no ha sentido ninguna reacción de la vacuna china, aunque antes de aplicarla padeció COVID-19. 

“Me puse la primera dosis el 24 de julio y la segunda dosis; si Dios quiere, Dios mediante; me toca el 14 de agosto. Es decir, exactamente, 21 días. Eso es lo que estipula los estudios científicos con relación a la vacuna china”

Explicó que la vacuna confeccionada en el país asiático es una cepa del virus que se puso inactiva (muerta) y se cultivó en células de riñón del mono verde. Agregó que tiene un lapso entre 35 a 45 días para poner la segunda dosis y que se puede extender hasta 180 días. Pero el asunto está en la inmunidad de cada persona: “la persona si tiene una buena respuesta inmunológica va a formar linfocitos T y linfocitos B, que son los que van a actuar para evitar que el virus siga propagándose y atenuarlo. Esa es la finalidad de la vacuna.

¿Dará Argentina vacunas Sputnik V a Venezuela? 

Tras el anuncio del instituto Gamaleya de Moscú sobre la aprobación de la producción de la segunda dosis de la vacuna rusa Sputnik V en Argentina, los venezolanos ponen su esperanzas en el juego.

“La vacuna rusa Sputnik fabricada en la planta de la compañía (argentina) Richmond estará disponible para vacunación en Argentina a partir de la semana próxima tras un exitoso control de calidad de pruebas en el instituto Gamaleya el 3 de agosto”, apuntó el Fondo Ruso de Inversiones Directas (RDIF) en un comunicado conjunto con el laboratorio en las afueras de Buenos Aires.

El proyecto se remonta a los reclamos por demoras en la entrega de la segunda dosis de Rusia. No obstante, Rusia negó el 9 de julio que la extensión del intervalo entre ambas dosis esté relacionado con un retraso de las entregas. Alegó todo lo contrario, sostuvo que la decisión fue de cada gobierno y que continúan produciendo para trasladar las dosis necesarias.

«Sputnik V acelerará el trabajo con otros productores de vacunas con respecto al enfoque de combinación, que desencadena una respuesta inmune fuerte y duradera», detalla su pagina web.