El obispo nicaragüense Rolando José Álvarez Lagos se negó el pasado 9 de febrero a ser desterrado y enviado a Estados Unidos, por lo que fue condenado a 26 años y 4 meses de prisión.
El sacerdote, muy crítico con el Gobierno del presidente Daniel Ortega, también fue despojado de su nacionalidad y suspendido sus derechos ciudadanos de por vida.
El presidente Daniel Ortega calificó la decisión Álvarez Lagos de «soberbio», «desquiciado» y «energúmeno».
Pese a que el juicio estaba programado para el próximo 15 de febrero, una jueza nicaragüense declaró al religioso «traidor a la patria» y autor de cuatro delitos en perjuicio de la sociedad y el Estado de Nicaragua.
Algunos organismos humanitarios en Nicaragua rechazaron la condena y exigieron su liberación y la restitución de sus derechos.
¿Quién es el obispo Rolando Álvarez?
De acuerdo con un artículo de Infobae, monseñor Rolando José Álvarez Lagos, de 55 años, nació en Managua en un hogar cristiano, donde el padre era obrero y la madre vendía atol. Desde niño mostró vocación por el sacerdocio.
En diciembre de 1994 fue ordenado sacerdote en la Catedral de Managua cuando tenía 28 años y el 2 de abril de 2011 asumió la jefatura de la Diócesis de Matagalpa.
En mayo de 2018, Álvarez integró el equipo del Conferencia Episcopal que sirvió de testigo y mediador en el primer Diálogo Nacional entre el Gobierno de Daniel Ortega y la oposición.
El viernes 19 de agosto de 2022, agentes policiales irrumpieron en el palacio episcopal provincial y fue detenido junto con cuatro sacerdotes, dos seminaristas y un camarógrafo, después de haber estado 15 días confinados.
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