A pocos días del inicio de la Copa América Brasil 2021, la Conmebol difundió las normas sanitarias de estricto cumplimiento para todos, e implica prohibiciones de algunas prácticas comunes en un campo de fútbol.
Las normas deben ser cumplidas por todo el personal de la Conmebol, las selecciones, cuerpo técnico, cuerpo médico, árbitros, árbitros asistentes y otros.
Un manual publicado por la Conmebol incluye información médica sobre el coronavirus, síntomas, cuarentenas, aislamientos, tipos de pruebas, protocolos concretos para aplicar antes de la entrada al país, durante los desplazamientos, entrenamientos y partidos.
El incumplimiento de una o varias normas sanitarias serán saldadas por la delegación o su federación representante con multas de un monto «no menor a 15.000 dólares» la primera vez, y por encima de 30.000 dólares si se repite.
Una vez que las selecciones arriben a Brasil y superan los procesos migratorios, serán subidos a un bus exclusivamente asignado a cada combinado para que sean trasladados directamente al hotel. Los conductores tienen prohibido realizar paradas, permitir el ingreso de alguna persona en el trayecto o cualquier otra práctica que pudiera poner en riesgo a las delegaciones.
A todas las selecciones se les prohíbe todo tipo de contactos con personas externas, y durante los entrenamientos solo se permitirá el acceso de los planteles y los médicos.
Las delegaciones también deberán presentar test PCR con resultado negativo antes de los partidos.
Durante los entrenamientos ningún personal que no sea del equipo médico supervisor tendrá acceso, lo que significa que la prensa queda bajo absoluta dependencia del equipo de comunicación de las selecciones.
En cada jornada de entrenamiento se tomará la temperatura que debe ser inferior a los 37,4º. Si algún jugador muestra una temperatura superior será aislado de forma inmediata.
Los jugadores deben acudir a los entrenamientos ya con el equipamiento adecuado para evitar el uso de las duchas de los vestuarios.
Por primera vez, la Conmebol exige a los equipos que sean alojados en un mismo piso y en habitaciones ‘single’ de forma obligatoria con el objeto de evitar circulación entre pisos y posibles contactos con otros huéspedes.
Durante los juegos no se podrá sonarse la nariz, así como besar la pelota. Tampoco podrán intercambiarse camisetas, banderines o cualquier otro elemento con terceras personas.
Antes de cada partido se tomará la temperatura a los miembros de las delegaciones.