Luego de los lamentables femicidios que se registraron recientemente en el municipio Turén del estado Portuguesa, la directora de Fundamujer y psicóloga social Ofelia Álvarez, señaló que la violencia de género no es un caso común, pues está decretado por las Naciones Unidas como una pandemia.
“Es un problema de machismo y de la sociedad patriarcal en la que vivimos; con la única diferencia que hay unas leyes que casi no se cumplen” comentó el psicólogo social, en entrevista a Radio Fe y Alegría Noticias.
Señaló que en el país el Ministerio Público solamente promete hacer unas cosas, sin conocerse las acciones sobre estos temas. Álvarez dijo que hoy en día no se satisfacen las promesas por parte de los entes del Estado y todo se queda en no saber nada.
Dijo que en Venezuela se tienen leyes, pero para cumplirse debe haber políticas públicas y actualmente están inexistentes
Comentó que a raíz de los hechos de Turén, leyó un mensaje de la red social Twitter escrito por una joven que vive en la localidad, manifestando el miedo a salir a las calles.
Sobre esta situación dijo que es importante revertir el miedo en acción, debido a que este sentimiento tiene aristas: el de paralizarse, que termina siendo una condición buscada por los asesinos y maltratadores; y el de salir a la calle en grupos para cuidarse.
«Complot perverso social»
Ofelia Álvarez cree además que algunos medios de comunicación muchas veces “desgraciadamente” lo que hacen es afianzar la sociedad patriarcal, pues muchos titulares de noticias buscan el “qué estaba haciendo la víctima”, enfatizando que por lo general los medios culpan a las afectadas.
“A veces la misma policía les dice las mujeres cuando llegan a denunciar a su pareja, ¿Qué estaban haciendo? O aconsejarlas con darle una segunda oportunidad a su esposo, esto es una especie de complot perverso social que se siente en la más mínima respuesta que consigue una mujer cuando valientemente denuncia”, agregó la directora de Fundamujer.
Álvarez reveló que la pandemia hizo además que a muchos hombres, cuando eran denunciados por cometer un hecho de violencia, su mecanismo de defensa al no tener a donde ir, terminaba regresando nuevamente a la casa.
Por último, Ofelia Álvarez precisó que “se necesitan dos cosas, lo primero un reglamento de la ley que organice porque sin reglamento cada quien decide por su cuenta y lo que hacen es repetir sus creencias sociales falsas; por otra parte, una capacitación reiterada, diagnosticada y monitoreada permanentemente con funcionarios públicos para que ayuden, dentro de la ley que hay que cumplir”.
Las tres víctimas de Turén
La primera víctima se trata de una menor de edad, de 17 años, de nombre Eliannys Andreina Martínez Roñoz. Fue vista por última vez el 21 de febrero tras estar en el culto de una iglesia evangélica, donde se congregaba.
El pasado martes 23 de febrero fue encontrado en el puente Las Marías de Turén, Portuguesa, el cuerpo sin vida de la jovencita Eduarlis Falcón, quien se hallaba desaparecida desde el día lunes.
De acuerdo a un primer informe, Eduarlis presentaba signos visibles de violencia sexual. Éste sería el segundo femicidio que se registra en esta población en menos de tres días.
En menos de 48 horas se registró un tercer femicidio en esta entidad venezolana, se trata de Carmine Sosa de 33 años de edad.
Sosa fue asesinada por su expareja cuando este se trasladó hasta su casa para pedirle que volvieran a estar juntos, al recibir un “no” como respuesta el agresor sacó su revólver y le propinó dos disparos a Carmine, uno de ellos en la cabeza y el otro en la región clavicular izquierda, falleciendo en el momento.
Femicidios en Venezuela
El Observatorio Venezolano de Violencia (OVV) indicó en su informe anual de 2020 que los casos de violencia sexual incrementaron significativamente con relación al año 2019, en todas las regiones del país. Esto se incrementó aún más en los meses con marcadas medidas de confinamiento.
“Durante las medidas de control sanitario y en el confinamiento en los hogares se hizo evidente el incremento de femicidios por parte de parejas o exconvivientes. La violencia sexual tuvo como víctimas a niñas, adolescentes y mujeres» principalmente, aunque hubo otros tipos de personas afectadas, explicó el OVV,