La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) emitió un documento donde manifiesta su preocupación por la aprobación de la reforma de la Ley Orgánica del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela.
Tal reforma fue aprobada en primera discusión por parte del parlamento venezolano el 18 de enero de 2022. Esta reforma estableció reducir el número de magistrados del TSJ de 32 a 20.
La CIDH también cuestionó que en la reforma aprobada no se prohíbe la reelección de magistrados. Este vacío permitiría al Estado mantener de forma indefinida a jueces por algún tipo de conveniencia, según lo creen en el organismo.
El tercer aspecto que la CIDH cuestiona es que la reforma también permitió cambiar la composición del Comité de Postulaciones. En lo adelante, estará conformado mayoritariamente por diputados nacionales restando participación a otros sectores de la sociedad civil.
Vale recordar que la Asamblea Nacional acordó alargar el plazo de postulaciones para este viernes 18 de febrero. Según las primeras informaciones iban más de 400 postulaciones.
A juicio de la CIDH, la reelección representa un «factor de fragilidad para la independencia judicial».
Y agrega, » una persona operadora de justicia que pretenda ser reelegida corre el riesgo de comportarse de tal modo que obtenga el apoyo de la autoridad encargada de tal decisión, o de que su comportamiento se perciba de este modo por los justiciables».
Ante este hecho, la Comisión instó al Estado venezolano a adoptar medidas urgentes y adecuadas para reconstruir la independencia del Poder Judicial.
#CIDH expresa preocupación por la reforma a la Ley Orgánica del @TSJ_Venezuela e insta al Estado de #Venezuela a adoptar medidas urgentes y adecuadas para reconstruir la independencia del Poder Judicial. #DerechosHumanos https://t.co/tRUoLcujyh pic.twitter.com/o7g2XDkw0b
— CIDH – IACHR (@CIDH) February 17, 2022
Otras preocupes de la CIDH
La CIDH resaltó que los mecanismos para promover publicidad, participación y transparencia en la elección de personas a las magistradas son muy importantes.
Tal proceso de transparencia permitiría una mayor certeza sobre la integridad de los jueces. Y, lo permitiría mayor confianza en el Poder Judicial por parte de los venezolanos.
Además, para la CIDH es cuestionable la reducción del número de jueces porque «el sistema de justicia ha jugado un papel significativo en la represión Estatal de opositores al gobierno».
También señaló que el sistema de justicia venezolano «no proporciona protección a las víctimas de violaciones de derechos humanos».
