Fedecámaras solicita revisar acuerdo comercial entre Colombia y Venezuela

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Adán Celis, primer vicepresidente de la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela (Fedecámaras), solicitó la revisión del acuerdo comercial firmado entre Colombia y Venezuela el pasado 16 de febrero.

En una entrevista que ofreció a Unión Radio, Celis dijo que las condiciones son desventajosas para los empresarios venezolanos. 

“Lo que hemos pedido es volver a revisar el Convenio 28”, expresó.

Destacó que los empresarios venezolanos no piden protección, pero sí solicitan igualdad de condiciones.

Igualmente aseguró que está previsto que se revise este acuerdo en el mes de junio de este año.

“Nosotros quisiéramos que se pudiera revisar antes, porque en este momento todavía son muy desventajosas las condiciones que tienen nuestros empresarios con los empresarios colombianos”, indicó Celis.

Maduro lo vio con “buenos ojos”

El primer vicepresidente de Fedecámaras se refiere al convenio comercial firmado por los presidentes de Venezuela y Colombia, Nicolás Maduro y Gustavo Petro, el jueves 16 de febrero.

El convenio comercial, titulado Acuerdo de Alcance Parcial de Naturaleza Comercial Nº 28, es el primero que ambos gobernantes suscriben en un encuentro dentro de una zona fronteriza. Antes, Petro había estado en dos oportunidades en la ciudad de Caracas.

Para Maduro, el documento establece los mecanismos iniciales para a futuro activar una Zona Económica Especial en este eje fronterizo.

¿Qué establece ese acuerdo?

Para conocer los detalles sobre el acuerdo, Radio Fe y Alegría Noticias a través del programa De Primera Mano, conversó con el presidente de la Confederación Venezolana de Industriales (Conindustria), Luigi Pisella, quien detalló que en este nuevo acuerdo se favorece la igualdad de condiciones de intercambio comercial.

Es un avance igualar el país con Colombia, puesto que en el acuerdo anterior (firmado en 2011) la balanza le favorecía al país cafetero con un 90 % de beneficios. 

A opinión de Pisella, era “totalmente asimétrico” porque Colombia podía enviar productos a Venezuela exentos de impuestos, mientras que aquí los únicos productos beneficiados a entrar al país vecino, con facilidades arancelarias, eran los que derivaran del petróleo o de la industria petroquímica.

“Ahora, lo que se trata es balancear el acuerdo y que los productos venezolanos entren con las mismas condiciones de Colombia”, resaltó.

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