Habitantes de El Amparo anhelan que se mueva la economía en la frontera

344
Asadero El Amparo
Asaderos de El Amparo cerrados/Foto: Radio Fe y Alegría Noticias

La señora María Fidelina Galíndez vive en la población fronteriza de El Amparo, municipio Páez, Apure. Anhela, como muchos habitantes de esta zona, que con la reapertura de la frontera se reimpulse la economía por estos lares.

En conversación con Radio Fe y Alegría Noticias recalcó que esto también permitirá que haya un paso seguro por el puente internacional José Antonio Páez que une a esta población venezolana con la ciudad colombiana de Arauca.

Y es que su sueño se remonta a la nostalgia histórica. Fue la primera fundadora «de los negocios asaderos de aquí y espero que los vuelvan a abrir. Que los abran porque hay mucho peligro para ir uno al otro lado con los niños, uno va arriesgando la vida».

Con su fe puesta en Dios, primeramente, María Fidelina desea volver a los tiempos cuando en su asadero «vendía tres cochinos, una novilla, dos ollas de sancocho, ya a las dos de la tarde estaba lista, más bien me faltaba comida».

En esa rememoración describió que antes del cierre unilateral por el gobierno venezolano de los pasos fronterizos «esto siempre estaba full, eso eran colas de gente esperando por la comida. Tenía que llegar la gente temprano, a las 8 de la mañana, diciendo apártame esto porque sino no alcanzaba».

Foto: Radio Fe y Alegría Noticias

Otra de las que anhela la reapertura es María Isabel Jiménez. Espera que con la reactivación «todo se normalice porque todo ha cambiado con ese cierre de frontera. Se nos ha hecho difícil. No es como antes que la gente venía, ahora le toca a uno ir a visitar a la gente para que vengan a comprar».

Su esperanza radica también en ofrecerle seguridad a sus hijos «porque cuando uno va en esa canoa (por el río Arauca) no te dan salvavidas y es un peligro para los niños y para uno también. Que abran la frontera, sería mejor para todos nosotros», asintió María Isabel.

Por Yrmis Ruiz/Radio Fe y Alegría Noticias