Luego de que trascendió la noticia de que el Gobierno de Estados Unidos reanudará los vuelos de deportación de migrantes a Venezuela, algunos activistas de derechos humanos se pronunciaron para rechazar la medida y exigir que se respete el principio de no devolución.
Marino Alvarado, miembro de la ONG Provea, alertó que esta medida, que fue aceptada por el gobierno venezolano, podría conllevar a que se ejecuten violaciones a los derechos humanos contra “refugiados y solicitantes de asilo”.
“La embajada de Estados Unidos debe respetar el principio de no devolución establecido tanto en el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos como en las normas sobre asilo y refugio”, escribió Alvarado en su cuenta de X.
“El acuerdo entre la dictadura #Venezuela y gobierno de Estados Unidos para la realización de vuelos para el regreso de venezolanos, se puede convertir en un ‘puente aéreo’ que lleve implícita violaciones a los derechos humanos de refugiados y solicitantes de asilo”, agregó.
En esa misma línea, Carolina Jiménez Sandoval, presidenta de la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA, por sus siglas en inglés), publicó en X que la decisión era lamentable e hizo un llamado a que se respeten los derechos humanos de los migrantes.
Cifra récord
Cabe resaltar que el anuncio de las deportaciones llegó justo cuando se había reportado que al menos 50.000 venezolanos cruzaron la frontera entre México y Estados Unidos en septiembre, lo que representó una cifra récord.
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