Luego de conocerse la condena de 16 años de prisión para seis sindicalistas que fueron detenidos en julio de 2022, en el marco de una serie de protestas para exigir mejores salarios para los trabajadores, este jueves 3 de agosto el fiscal general, Tarek William Saab, negó que estos ciudadanos realmente sean sindicalistas.
Según Saab, muchas de las informaciones sobre el caso son una campaña para hacer ver que se están violando los derechos humanos de Alcides Bracho, Emilio Negrín, Gabriel Blanco, Reinaldo Cortés, Alonso Meléndez y Néstor Astudillo.
Saab se basa en el hecho de que no fueron detenidos mientras realizaban actividades sindicalistas y que supuestamente durante el proceso judicial ningún gremio dio su respaldo a los enjuiciados.
“Se hizo este ropaje para lesionar al Estado venezolano. Ninguno de los ciudadanos presentó alguna constancia que los acreditase como integrantes de algún sindicato”, comentó en declaraciones a Venezolana de Televisión (VTV).
Asimismo, el fiscal detalló que la investigación determinó que todos eran trabajadores inactivos y que presuntamente las comunicaciones telefónicas eran con fines conspirativos y con intenciones de apropiarse de armas del Estado venezolano.
“Planificaban actos de sabotaje y entorpecimiento de las actividades del 5 julio del 2022, donde se encontraba presente el mandatario Nicolás Maduro”, agregó.
Con información de Tal Cual, Diario República
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