Oración de la mañana. Miércoles 27 de abril de 2022.
Por Herlinda Gamboa. Narra Julitze Mayurel.
Cafecito de la esperanza en Tiempo de Pascua
Señor Jesús, dedico un tiempo de mi plegaria para reconocer lo que estás haciendo en mi vida. Tu Palabra busca un hogar en mi corazón y me llama a la Vida Eterna. Así es como Dios ama al mundo, mandándote, de modo que podamos vivir realmente. Vivir el mensaje del Evangelio requiere movernos de la sombra de las tinieblas hacia la luz. Poner en juego nuestra vida por ti, el regalo prometido es saber que en esta vida Dios se está moviendo, viviendo y actuando en nosotros, cada día.
Dios te entregó, el Hijo único del Padre Eterno. Creemos que Dios intervino en la historia de la humanidad y nos entregó su Hijo, para mostrarnos que era un Padre que nos amaba…Los momentos en oración nos llevan al mundo de Dios, del misterio y de la perseverancia. Nos permite descansar en el misterio de ser amados, nos pide ser totalmente “para” ti y “para” los otros. No hay ataduras ni heridas amarradas al amor de Dios. Orar es abrirnos a tu luz que entra totalmente, aligera las cargas de la vida, y la entusiasma a compartir esa luz con los otros.
En nuestro café de esta mañana, nos hacemos presente frente a frente, como Nicodemo, y me pregunto ¿siento esperanza, o condena, en mi oscuridad, siento tu Amor total y tu invitación hacia la luz? Amas al mundo, nos amas a cada uno, me amas a mí. Este es tu mensaje completo de Jesús, expresado en tus palabras y hecho cuerpo, a lo largo de toda tu vida. «No existe nada más».
¿Estoy convencido de esto?
Danos tu amor y gracia que eso nos basta. Amén. PAZ Y BIEN.
Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.
