En una rueda de prensa que se llevó a cabo en la sede de la Corporación Venezolana de Guayana (CVG), en Puerto Ordaz, la Intersectorial de Trabajadores (ITG), que agrupa a diferentes dirigentes sindicales y secretarios generales de todas las empresas, fijó su posición sobre los hechos de corrupción que forman parte de la operación “Caiga quien caiga”.
Como parte del operativo, impulsado por el Gobierno de Nicolás Maduro, el fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab confirmó la detención de nueve funcionarios que formaban parte del tren gerencial de la CVG.
Entre los primeros nombres está Pedro Maldonado, hoy expresidente de la CVG; Néstor Astudillo, presidente de la Siderúrgica del Orinoco (SIDOR); Edgar Sánchez, vicepresidente de Planificación; Felipe Contreras, vicepresidente de Hierro y Acero; Lino Mora, vicepresidente ejecutivo; Tulio Medina, vicepresidente de Finanzas; Carlos Moreno, gerente de Tráfico y Aduanas; Johan Sequera, director de Despacho; e Isaac Mouhamad Salazar, gerente de Asuntos Legales.
El 30 de marzo una comisión, conformada tanto con miembros de la Policía Nacional contra la Corrupción como del Sebin, llegó al edificio de la CVG y allanó las instalaciones con el objetivo de llevarse a los implicados.
Durante la rueda de prensa, los trabajadores expresaron que la gestión de Maldonado estuvo marcada por el descontrol y que no tomaron la noticia como una “sorpresa”, puesto que desde el inicio él tenía clara su línea de acción.
“Para nosotros los dirigentes sindicales serios y los trabajadores de las empresas, esto no es ninguna sorpresa. Denuncias hay en toneladas: en la fiscalía, en la inspectoría del trabajo, en la Defensoría del Pueblo de los actos de corrupción y aquí nadie hacía nada”, aseveró Ramón Gómez, dirigente de la empresa CVG, quien fue víctima de lo que él denomina una jubilación forzosa.
Con esto, los trabajadores aseguraron que los actos de corrupción dentro de la CVG no se vienen dando solo desde la gestión de Pedro Maldonado, puesto que “es una situación de años”.
Cambios
“Maldonado llegó a la CVG con un plan. Comenzó eliminando los sindicatos, sindicatos que estaban en pleno ejercicio de sus funciones los eliminó, inició con CVG y luego se trasladó a otras empresas”, comentó Gómez.
Del mismo modo, puntualizó que hubo oficinas que fueron clausuradas y también se dejó de tener un control referente al área de contraloría y auditoría de contratos.
Desde que inició el 2023, trabajadores de diferentes sectores de Ciudad Guayana se han manifestado para exigir reivindicaciones salariales y afirmaron que continuarán en la calle hasta lograr una respuesta positiva por parte del Gobierno.
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