Un grupo de la sociedad civil de México intenta impedir la construcción de siete hidroeléctricas sobre el río Ajajalpan, que afectaría varias zonas de alta producción agrícola.
El grupo exige al Gobierno de México impedir el ingreso del grupo empresarial Comexhidro, cuyo objetivo más próximo es construir 7 instalaciones hidroeléctricas sobre el río Ajajalpan.
Una de las personas que lidera este movimiento es Teresa Santiago, defensora del río Ajajalpa de la Sierra nororiental del estado de Puebla e integrante del Consejo Regional Tutonakú.
Los residentes de las zonas de afectación argumentan que la construcción de las hidroeléctricas dañará la tierra que producen. “Eso dañará la madre tierra. Ahí vivimos y ahí cosechamos”, dijo Teresa Santiago citado por Contacto Sur, el informativo que transmite Radio Fe y Alegría Noticias.
Los protestantes afirman que la incursión de la empresa ha violenta varios derechos, además de realizar prodecimientos ilegales.
Uno de los hechos ilegales sería la simulación de una consulta que jamás fue realizada. Además, denunciaron que el grupo está incurriendo en prácticas deshonrosas al repartir dádivas, en su intento de lograr apoyo de los residentes.
También se han unido los pueblos de los municipios Ahuacatlán, San Felipe, Tekapán y Tlapakoya para continuar una lucha de carácter legal y política.
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