El rector de la Universidad Nacional “Casimiro Sotello”, Alejandro Genet, que funcionará en la sede de la confiscada Universidad Centroamericana (UCA), dijo que se garantizará el derecho a una educación de calidad gratuita.
“Te decimos Casimiro, y le decimos a nuestros héroes y mártires que nos comprometemos a hacer realidad su sueño y legado, honraremos en esta, tu universidad, el porvenir que soñaste para Nicaragua bendita y siempre libre”, dijo en un discurso de instalación de la universidad nacional en su nueva sede en la antigua UCA.
Y agregó: “Nuestro deber es promover una revolución educativa y cultural para el desarrollo humano desde la Universidad Nacional Casimiro Stello Montenegro”.
La contradicción de las autoridades
También dijo que esperaba a la población estudiantil que esturiará en la nueva sede de la Universidad Nacional “Casimiro Sotello Montenegro”. No obstante, no fue del agrado de las autoridades del Consejo Nacional de Universidades.
Genet dijo que la Universidad Nacional Casimiro Sotello Montenegro “será gratuita”.
“Ratificamos nuestro compromiso de asegurar a nuestros estudiantes educación con calidad y pertinencia. Estamos asegurando la calidad educativa de nuestro estudiantado, informando que la Universidad Nacional Casimiro Sotello Montenegro será gratuita. Nuestros estudiantes no pagarán ningún tipo de arancel”, aseveró.
Sin embargo, en menos de 48 horas, las declaraciones del rector fueron desmentidas por parte de la presidenta del Consejo Nacional de Universidades (CNU), Ramos Rodríguez.
La autoridad del CNU dijo que los estudiantes que ingresen a la Universidad Nacional Casimiro Sotello Montenegro sí deben pagar un tipo de arancel.
El sector estudiantil ha cuestionado desde el primer momento el anuncio del CNU, debido a que en Nicaragua ningún estudiante de ninguna universidad estatal paga algún tipo de arancel.
Algunos ex estudiantes de la UCA prefieren migrar a la UCA de El Salvador
De acuerdo con las últimas informaciones, la mayoría de los estudiantes de la UCA hasta el momento de su confiscación prefieren continuar en la nueva universidad pública.
De una población estudiantil de 8 mil estudiantes, solo se han matriculado 3.400 alumnos. Unos 500 prefieren seguir sus estudios en la sede de la UCA en El Salvador, país vecino de Nicaragua.
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