Santa Lucia, también conocido como “El Empedrao” por sus calles de piedra, es un barrio emblemático de Maracaibo caracterizado por su devoción a Santa Lucía, patrona de los ciegos. También por ser cuna de grandes artistas como el gaitero zuliano Astolfo Romero o el exgrandeliga Luis Aparicio.
Al igual que el resto del país no escapa de la crisis en servicios públicos que azotan a las diferentes regiones del país. En Santa Lucia, las fallas en el servicio de agua representan un dolor de cabeza para sus habitantes.
“Tenemos que salir a comprar agua y no hay dinero”, apunta Jorge Prieto, habitante de Santa Lucia.
La vida de Prieto cambió desde hace aproximadamente dos meses, cuando empeoró el servicio de agua potable por la turbidez con la que llega a los hogares marabinos.
En sus gastos debe sumar ahora 1 millón de bolívares para comprar un botellón de agua que destina para cocinar y tomar.
“Cada día aumenta más. Gasto 1 millón de bolívares prácticamente diario en un solo botellón, si lo sumas al mes son 30 millones y ni siquiera el salario nos alcanza para eso, solo vivimos para comprar agua”, aseguró.
El señor Jorge convive con otras 4 personas en su hogar, razón por la cual de igual manera debe utilizar el agua que llega para bañarse y darle bomba al baño. Agua que al asentarse se observa el barro al fondo.
“Es algo incómodo, nosotros nos queremos bañar para quitarnos la mugre y salimos peor, salimos con el cuerpo acartonado. Hay un daño colateral fuerte, se generan infecciones en las partes íntimas, en la vista, infección bucal…”, insistió.
Por otra parte, Jorge lamentó que hay personas que se cepillan con esa agua porque no tienen dinero para comprar un botellón, las autoridades “no saben el daño que se ha ocasionado”.
Las autoridades de la región han explicado que la turbidez del agua se debe a las lluvias registradas que arrastran mayor cantidad de sedimentos de las cuencas. Por su parte, Lusbi Portillo, coordinador General de la Fundación Homo Et Natura, recientemente dijo que las cuencas se encuentran deforestadas, lo que empeora aún más la situación.
El servicio de agua no es frecuente
Es importante resaltar que las fallas en el servicio de agua no son nuevas para la capital zuliana. Hace 3 años el gobernador Omar Prieto, decretaba en la región un plan de emergencia para mejorar la distribución de agua potable, que hasta la fecha sigue sin resolverse.
Al menos en Santa Lucia el agua llega con poca frecuencia. El señor Jorge recuerda que el año pasado el agua solo llegó una vez.
“Muchos hablan que han cerrado la llaves, que las tuberías están tapadas”, dice Jorge.
Específicamente en la calle 89D el agua llego solo una vez el año pasado. Y actualmente para agarrar agua extienden una manguera desde sus casas hasta la Plaza de Santa Lucia para suministrar sus hogares de agua. “Prendemos la bomba y llenamos apenas uno o dos pipas que es lo que nos permiten llenar”, detalló.
Sobre la distribución de agua el pasado 21 de julio el director de Servicios Públicos de la Alcaldía de Maracaibo, Roberto Rojas, informaba que hay 2 mil 900 litros por segundo llegando a la ciudad, aunque aclaró que «no estamos en la situación óptima porque la ciudad necesita de 5 mil a 6 mil litros por segundo para llegar a todos los sectores”.
El aseo urbano… Otro calvario
Los habitantes de Santa Lucia sacan la basura hasta la avenida principal, alegando que si lo acumulan en sus casas se convierten en el segundo basurero municipal de Maracaibo.
Anteriormente los camiones recolectores de basura pasaban casa por casa a recoger los desechos. Sin embargo, ahora pasan por las plazas o esquinas que funcionan a la par como vertederos de basura
Marianela Chacín explicó a Radio Fe y Alegría Noticias que deben colocar la basura en el Boulevard de Santa Lucia para evitar las moscas dentro de la casa y evitar que los niños que se enfermen.
¿Y el gas? Tampoco hay
Chacín indicó que recientemente en la calle Nueva Venecia el ente municipal realizó unas reparaciones para restablecer el servicio de gas doméstico, afectando a otras calles de Santa Lucia donde la cantidad de gas disminuyó. La última vez la señora Chacín gastó 45 dólares en dos bombonas de gas que equivalen a más de 180 millones de bolívares.
“Tenemos que andar con lidia de las bombonas, la grande cuesta 25 dólares, la mediana 15 y la pequeña 8 dólares, que es dinero para nosotros los venezolanos porque no lo ganamos”, expresó angustiada.