De acuerdo al índice de precios al consumo (CPI) del Departamento de Trabajo, el incremento de precios del petróleo alcanzó 6,8% en noviembre pasado comparado con el mes de 2020, luego de marcar 6,3% en octubre.
La instancia indicó que los precios del petróleo tuvieron una subida este viernes, siendo su mejor semana desde agosto, a pesar de caer el jueves en un mercado que observa con incertidumbre la evolución de la nueva variante del coronavirus Ómicron.
De igual forma, el precio del barril de Brent del mar del Norte para entrega en febrero ganó 0,98% a 75,15 dólares en Londres.
Mientras tanto en Nueva York, el barril de West Texas Intermediate (WTI) para entrega en enero ganó 1,02% a 71,67 dólares.
Esto muestra que los precios del crudo tuvieron un incremento de casi 8% en la semana, para colocarse en su nivel de mediados de septiembre.
Inflación en EE.UU impulsó al petróleo
Por otro lado, la inflación en Estados Unidos se ubicó en un máximo en 39 años, impulsada principalmente por los precios de la energía.
“Cuando la inflación fue anunciada y estuvo en línea con las expectativas del mercado, observamos inmediatamente caer el dólar y a los precios de crudo subir”, expresó Matt Smith, director de investigación de materias primas de ClipperData.
Del mismo modo, señaló que la semana próxima el mercado recibirá el informe mensual de la OPEP sobre demanda y las reservas comerciales de crudo en Estados Unidos, que “deberían comenzar a bajar a fin de año”.
El mercado observa con atención la pandemia, preocupado por saber si ómicron llevará a nuevos confinamientos que limiten los desplazamientos y por ende el consumo de petróleo.