46% de los venezolanos estaría dispuesto a ir a las parlamentarias sin participación opositora

27
Foto: referencial.

Una encuesta realizada por el Centro de Estudios Políticos y Gobierno (CEPyG) de la Universidad Católica Andrés Bello y Delphos, arrojó como resultado que el 46,6% de los consultados estaría dispuesto a ir a las parlamentarias sin participación de la oposición.

Asimismo, reflejó que 58,9% de los venezolanos mayores de 18 años de edad está prevenido para votar en dichas elecciones, fijadas para el 6 de diciembre.

Las proyecciones se presentaron durante la segunda sesión del foro Prospectivas II Semestre 2020 organizado por la casa de estudios.

Durante su realización, el director del CEPyG, Benigno Alarcón, presentó la proyección de escenarios posibles. Para ello partió del análisis de variables determinantes en la dinámica política.

Señaló que Venezuela descendió en los principales índices de democracia, ubicándose en 2019 en el puesto 140 entre 160 que incluye la The Economist Intelligence Unit. Resaltó el hecho de que el país esté por debajo de Rusia y a la par de muchas naciones del continente africano, «donde se concentra la mayor cantidad de regímenes autoritarios».

Elecciones «no competitivas»

En cuanto a las elecciones parlamentarias de diciembre, consideró que se está en un proceso de mayor «autocratización» por razones atribuidas al Gobierno.

«El análisis de distintas variables hace prever que serán unas elecciones multipartidistas, pero no competitivas. Esto se debe a que en ella participarán partidos que fueron intervenidos judicialmente y otros que decidieron participar sin exigir suficientes condiciones electorales, aceptando las reglas que el régimen impone. Es poco probable que la oposición consiga una mayoría de la Asamblea Nacional», explicó Alarcón.

A juicio del director del CEPyG, la coyuntura generada por la incidencia de COVID-19 sirvió al Gobierno de Maduro como justificación «para activar mecanismos represivos y para un mayor control social».

Añadió que con ello se logró desarticular las estrategias de movilización de la oposición, que había iniciado en febrero al regreso de la gira internacional de Juan Guaidó.

Alarcón afirmó que ante la previsible pérdida de espacios institucionales de representación, como la Asamblea Nacional, la oposición democrática necesita recomponerse «superando la frágil cohesión que presenta en la actualidad».