La ansiada renovación Vinotinto aún no comienza

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Los venezolanos debutarán contra Colombia

Este viernes 25 de marzo de 2022 se juega la penúltima fecha del premundial en la zona Conmebol. Venezuela debe medirse sin chance de clasificar ante la selección de Argentina, segunda en la tabla rumbo a Catar.

La llegada de José Pékerman a la dirección técnica de la Vinotinto supuso una revolución mediática, pero también se espera una revolución en el vestuario.

Hay que resaltar que la actual selección nacional también cuenta con jugadores cuya edad promedio es de 24 años, y serán fundamentales en la próxima Eliminatoria.

Pékerman se estrenó con una goleada a Bolivia 4-1 en la fecha 16, y despertó nuevos aires en la selección nacional. En el siguiente partido correspondía jugar contra Uruguay. Los charrúas acabaron con el espejismo y lo regresó a la realidad. Este juego terminó 4-1 a favor de los uruguayos.

Y ese resultado, por si fuera poco, dejó a Venezuela sin chance de clasificar a Catar 2022 y cónsono con el discurso de Pékerman, el objetivo impuesto fue para el 2026.

Con este nuevo enfoque inyectó la necesidad de un recambio generacional que debió afianzarse con hechos esta última convocatoria para las fechas 17 y 18.

Continuidad y próxima Eliminatoria

Al mirar la última convocatoria, la decisión de Pékerman es apostar por el mejor cierre en resultados, y no en iniciar el recambio generacional, por lo pronto.

También es notorio que apuesta a la continuidad de jugadores que tienen entre 24 y 30 años, seguramente pensando en la madurez que habrán alcanzado para la próxima Eliminatoria. Esta decisión es positiva, pero no dista de algunos cuestionamientos.

Dos enfoques de la renovación necesaria

Hay algunos nombres que, si bien es cierto tienen una edad promedio que podría alcanzar una madurez notable, han aportado poco para la evolución del juego de la Vinotinto.

Otros solo cerrarán esta Eliminatoria, y para el próxima ciclo su edad será un impedimento natural, porque su rendimiento seguirá en declive como un efecto normal por la edad.

Fernando Aristiguieta, de 29 años, es uno de esos nombres sin incidencia. Para el 2026 tendrá 33 años, para la mayoría de los jugadores es el último tramo de la plenitud física. No obstante, su historial con la Vinotinto es cuestionable.

El debut de Aristiguieta ocurrió en el año 2011. Doce años después no ha alcanzado el nivel esperado. En los distintos procesos ha estado relevado al banco, y su puesto podría ser perfectamente ocupado por otro joven con potencial y en pleno crecimiento para que se vaya adaptando desde ya al nuevo proceso.

Luis «Cariaco» González, tiene 31 años, y su crecimiento alcanzó su mayor esplendor sin ser aprovechado a plenitud. Su último tren tiene nombre: Pékerman.

Si «Cariaco» no pudo afianzarse en siete años, y si no recibe la confianza del técnico argentino para jugar contra Argentina y Colombia, su puesto ya debería estar a disposición de un nuevo talento. Para el 2026 tendrá 35 años.

Josef Martínez, un jugador determinante en su club del fútbol estadounidense. Es un extraordinario futbolista que pudiera aportar más con un esquema que permita a dos delanteros. Pero no es el caso de Venezuela, salvo un inesperado viraje en el sistema de Pékerman. Su nombre ha estado más cerca de las polémicas que de fútbol.

Un emergente delantero con ilusión de vestir la elástica de la selección nacional, sería un perfecto sustituto para este talentoso pero polémico delantero.

Los nombres que ya no pesan

Salomón Rondón, el delantero ya no es el jugador que lo catapultó como «El Gladiador». Solo queda su historia. Su actualidad dista de la calidad que lo llevó a la selección.

Tiene 32 años y su declive es notorio desde mediados del 2021, en su club actual perdió la confianza de técnico al punto de no ser convocado. Ya ni siquiera juega.

Pese a su inactividad fue convocado. Según el entorno de la selección, el peso de su experiencia fue determinante, según la prensa, Pékerman intenta darle oxígeno.

Roberto Rosales, de aquel lateral derecho de garantía, apenas queda el nombre. Sin oportunidad ante otras figuras emergentes, ya no representa ni siquiera competencia en el vestuario. En el 2026 tendrá 37 años. Su ciclo ya terminó, pero solo Pékerman lo mantiene ocupando un puesto que pudiera servir de vitrina a un nuevo lateral que imponga mayor competencia, con la consecuente calidad que impondría en el puesto.

El último es Tomas Rincón. Pese a todo, su presencia está justificada porque sigue jugando en su club, es capitán en la selección y su presencia impone respeto.

Es una figura que ha de llevar por el camino más provechoso a los nuevos baluartes de la Vinotinto que aún no llegan.

Solo dos emergentes

De las nuevas figuras, solo dos son realmente figuras emergentes: Yerson Chacón y Telasco Segovia, ambos jugadores tienen apenas la mayoría de edad.

Chacón es un extremo, y Segovia es un lateral derecho. ¿Será Segovia el sustituto de Roberto Rosales?. El tiempo y su juego lo dirán.