Países como México, India, Pakistán Honduras, que en este 2020 representaron el 68 por ciento de los 50 periodistas objeto de crímenes en todo el mundo, aparecen como los más peligrosos para el ejercicio periodístico aún sin estar en guerra, de acuerdo a un informe de la ONG Reporteros Sin Fronteras.
El estudio, dado a conocer este martes 29 de diciembre, revela también que 50 informadores fueron asesinados, una cifra similar a los 53 muertos de 2019, pese a que los confinamientos forzados por la pandemia han supuesto una caída de los reportajes sobre el terreno.
En un 84 por ciento las víctimas fueron objetivos elegidos de manera deliberada, frente a un 63 por ciento en 2019, y RSF resalta que algunos de ellos murieron en condiciones “particularmente salvajes”.
Reportes Sin Fronteras, con sede en París, manifiesta a su alarma por el notable incremento de muertes en países en paz.
“Es una tristeza constante. En 2020, con ocho asesinados, México confirma su posición de líder en la categoría de países más peligrosos para la profesión”, indica el informe, el cual denuncia que los vínculos entre el narcotráfico y la clase política se mantienen.