La cotorra margariteña resiste gracias al trabajo de José Manuel Briceño y a los guardianes de los nidos. En 1989 había entre 100 y 700 ejemplares.
El 25 de mayo de 2023 la National Geographic anunció que el venezolano José Manuel Briceño, biólogo y ambientalista era uno de los ganadores del premio Buffett por su liderazgo en conservación. Se otorgó el reconocimiento por el trabajo de rescate de la cotorra margariteña.
Desde hace 34 años Briceño trabaja por conservar los nidos, evitar el saqueo y reforestar ecosistemas que permiten a esta especie mantenerse en la Península de Macanao. Pero el trabajo no lo hace solo, junto a él están los guardianes, un grupo de habitantes de la zona que con la palabra intentan convencer a los depredadores de unirse a la cruzada salvadora.
El trabajo por salvar a esta especie de loro comenzó en 1989, cuando representantes de la sociedad zoológica de Nueva York fueron a Nueva Esparta y contabilizaron 100 ejemplares de la cotorra. La cifra alertó a José Manuel y asumió la tarea de crear un plan para salvar a esta especie de loro. Por aquellos días realizaron un censo más detallado y contaron hasta 700.
Durante el programa Háblame bajito, que transmite Radio Fe y Alegría Noticias, José Manuel Briceño anunció que ya existen entre 2 mil y 2 mil 100 cotorras en Macanao y que gracias al trabajo que hacen, la especie pasó de estar en peligro a estar amenazada.
Guardianes de la Cotorra Margariteña
La tarea conservacionista no es de un solo hombre o de una sola mujer. En los últimos años se han formado hasta 90 ecoguardianes, jóvenes y mujeres que asumen la tarea de formarse para salvar los ecosistemas. En la actualidad y pese a la crisis, en la península todavía hay 18 guardianes de los nidos.
Briceño alentó a los conservacionistas y explicó que, a diferencia de otros países, estos guardianes no tiene armas y solo cuentan con información y sus discursos para convencer a los demás.
Reforestación contra la minería
La minería a cielo abierto que practican los comerciantes de arena es una de las causas de la deforestación y la desaparición de especies locales. En este sentido, el también subdirector de la organización Provita, José Manuel Briceño contó que desarrollan un plan de reforestación de los suelos explotados.
Desde hace 15 años se han sembrado 13 mil nuevos árboles en los suelos desnudos que deja el extractivismo.
El proceso de reforestación es clave para que los loros mantengan sus nidos que elaboran en los árboles. Briceño y los equipos han descubierto que también sirven los nidos artificiales hechos en troncos muertos o en tuberías de PVC.
“La conservación si funciona”, asegura Briceño, funciona cuando es parte de un proceso sostenido y organizado.
¿Dónde hay cotorras margariteñas?
La cotorra margariteña o amazona barbadensis vive en la Península de Macarao, en su mayoría, pero también se han identificado especies en Sucre, Anzoátegui, Lara y Falcón.
En las islas del Caribe también hay o hubo, existen en Bonaire y Curazao. También hay registros de su extensión en Aruba y en la Península de Paraguaná.
La existencia de esta especie le permite a los margariteños soñar con que es posible desarrollar una actividad económica inspirada en el ecoturismo para cambiar la realidad extractiva que atenta contra los ecosistemas de la zona.
“Se puede construir un geoparque”, que permitiría la observación de aves y otras prácticas turísticas sostenibles que pueden generar beneficios económicos a las comunidades, aseguró Briceño
Escuche la entrevista que ofreció el subdirector de Provita, José Manuel Briceño al programa Háblame bajito
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